Será este jueves, 26 de Enero a las 20:00 h. en la sala nº 12 de los Cines Las Vías.
El legendario director Zubin Mehta dirige AIDA, la ópera verdiana más espectacular, en una producción del Teatro del Maggio Musicale Fiorentino.
Aída es una ópera en cuatro actos con música de Giuseppe Verdi y libreto en italiano de Antonio Ghislanzoni, basado en la versión francesa de Camille du Locle de la historia propuesta por el egiptólogo francés Auguste Mariette.
Aída fue estrenada en el Teatro de Ópera del Jedive en El Cairo el 24 de diciembre de 1871 con motivo de la apertura del canal de Suez. Verdi no viajó a El Cairo: los viajes por mar estaban muy lejos del ánimo del «campesino». Por medio de un telegrama se enteró aquella misma noche del extraordinario triunfo de su obra. Despertó gran júbilo la marcha triunfal, para la cual el director de orquesta Giovanni Bottesini había llevado unidades del ejército egipcio, que también tocaron las «trompetas de Aída»; también se entendió el final sereno e íntimo, lo que dio una gran satisfacción a Verdi.
La historia se desarrolla en Menfis y Tebas. Aída, una etíope esclava vive en el palacio imperial de Menfis. Está enamorada de Radamés, el valiente guerrero Egipto, que en secreto le corresponde. En ese contexto, las tropas etíopes están invadiendo el Imperio, conducidos por Amonastro, el padre de la cautiva. El encargado de dirigir el combate para derrotarlas es Radamés. Luego, en la celebración por la victoria de aquella tierra, Aída confiesa a la hija del faraón, -quien también quiere al guerrero-, su amor por él. El rey concede un deseo a Radamés por su victoria, y éste le pide que libere a los prisioneros. Como agradecimiento le ofrece la mano de su hija y la sucesión al Trono. La noche anterior al matrimonio, Aída está esperando a su adorado, en uno de sus refugios clandestinos.
Su padre, quien la encuentra, le suplica que intente sonsacarle los planes de ataque de Egipto contra sus tropas. Ella lo consigue, pues él le indica el camino que tomarán, por lo que devela al padre de su amada, -escondido-, la información. Pero la hija del faraón, también escucha todo y se lo cuenta a los sacerdotes. Después, en la sala del palacio del faraón, Radamés es juzgado por su traición. Pero será perdonado si repudia a Aída, petición que no puede cumplir. Finalmente, es condenado a muerte para ser enterrado vivo. Cuando está en la sala lapidada, descubre que su adorada se escondió allí para morir junto a él.
Como ya es costumbre 15 minutos antes de la retransmisión se hará una breve introducción a la obra a cargo del Círculo de Bellas Artes de Ciudad Real.