La concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Valdepeñas ha puesto en marcha un Plan de Gestión de Residuos Urbanos mediante el cual pretende mejorar la limpieza viaria de la ciudad y concienciar sobre los comportamientos poco cívicos de los ciudadanos.
La teniente alcalde de Medio Ambiente y Agricultura, Amparo Crespo, señaló que para ello se han invertido cerca de 30.000 euros para la instalación de medio centenar de nuevas papeleras en el casco urbano que se sumarán a las 500 ya existentes y que se ubicarán en la calle Seis de Junio, Cristo, Balbuena, Virgen, Bataneros, Avenida de los Estudiantes y Plaza de España.
“Quiero apelar al civismo de los ciudadanos para que algo tan simple como tirar envoltorios a la papelera sea una realidad”, apuntó Crespo, que hizo un llamamiento para concienciar a la población sobre la importancia de mantener limpias las calles de residuos urbanos y de deposiciones de mascotas.
En este sentido, Crespo hizo una crítica al “poco esmero” de muchos propietarios de mascotas que no se encargan de recoger las deposiciones de sus animales durante los paseos por la vía pública. “No queremos sancionar, sino prevenir”, señaló la teniente alcalde de Medio Ambiente y Agricultura, que recordó que en la concejalía se regalan bolsas a los propietarios de animales para que puedan utilizarlas en los paseos con sus mascotas y que las sanciones por no recoger los excrementos de los animales alcanzan los 150 euros, que pueden incrementarse si el can no cuenta con una tarjeta censal, microchip, si no pasea atado con correa o si no lleva bozal, en caso de ser un perro de raza potencialmente peligrosa.
En Valdepeñas hay 800 perros censados y se calcula que alrededor de 2.000 canes no tienen su registro correspondiente, por lo que Crespo recordó la obligatoriedad de tener una tarjeta censal blanca para el espacio urbano o una tarjeta censal azul para animales que están en zona rústica.
En los últimos seis meses la Policía Local ha efectuado diez denuncias por perros abandonados cuyos datos son cotejados con el Sistema de Identificación de Animales de Compañía de Castilla-La Mancha (SIACAM), cuatro por perros perdidos sin microchip, una por mordedura, cuatro por molestias y una por llevar a un perro potencialmente peligroso sin bozal.