La cofradía y la asociación vecinal las han hecho coincidir con el fin de semana para que más gente pudiera disfrutarlas
El ciclo de los Santos Viejos 2025 ha llegado a su fin. Después de los actos en honor a San Antón, a la Virgen de la Paz y a la Virgen de la Candelaria, las fiestas de San Blas cierran esta ancestral tradición que sigue muy arraigada en Manzanares. Este año, como novedad, las actividades se han adelantado al fin de semana para que más gente pudiera participar de ellas.
El cambio de fechas de las fiestas en honor a San Blas ha sido acertado. Así se ha comprobado durante el fin de semana, ya que los actos organizados por la cofradía y la asociación vecinal del barrio han contado con una alta participación. “Nuestro objetivo era que todo el mundo pudiera celebrar estas fiestas”, señaló el presidente de la asociación Andrés Roncero, que se ha mostrado “muy contento” con la gran cantidad de gente que se dio cita, sobre todo, en la hoguera y en la procesión.
La parroquia de la Asunción ha acogido estos días a San Blas, ya que su ermita actualmente no está en disposición de albergar los actos religiosos organizados con motivo de sus fiestas. Así que allí se realizó el rosario y el triduo en su honor entre el miércoles y el viernes, así como la misa del sábado. El pliego de cordel, con el que tradicionalmente comienzan las fiestas, este año tuvo lugar en el Castillo de Pilas Bonas el viernes. A cargo de la asociación cultural ‘El Zaque’, versó sobre los ‘Pueblos de Ciudad Real en el refranero geográfico español’.
Una vez dada cuenta del pliego de cordel, la acción se trasladó a la plaza de San Blas, donde la ciudadanía cumplió con su cita con la hoguera. El calor de la lumbre ayudó a combatir el frío, como también el caldo que vendió la asociación vecinal. Fue una buena manera de abrir el apetito, que algunos saciaron asando sus viandas en las ascuas y otros con un montado adquirido en la barra gestionada por el CB Manzanares.
La procesión se programó para la tarde del domingo. La imagen de San Blas, acompañada por muchos mayores y pequeños vistiendo blusón y traje manchego y capa española, partió de la parroquia de la Asunción y discurrió por las calles Virgen del Carmen, plaza de San Blas, Matadero, Villarreal y Monjas para regresar hasta la plaza por la calle Virgen del Carmen. La comitiva, formada por miembros de la cofradía, de las hermandades de Semana Santa y autoridades civiles y religiosas, estuvo amenizada musicalmente por la banda de la AMC ‘Julián Sánchez-Maroto’.
El colegio ‘San José’ se ha sumado a las fiestas en honor a San Blas 2025 en la mañana de este lunes, día de San Blas. Su alumnado, junto al de otros centros de la localidad, ha pasado una divertida mañana de juegos. Competiciones deportivas, concursos de dibujo y de repostería o juegos tradicionales como el aro o la peonza han sido algunas de las actividades que han hecho disfrutar a los niños y niñas.
Además, en la ermita se han terminado de vender las últimas rosquillas de pan, que han vuelto a triunfar para protegernos la garganta, y también los rosquillos dulces (de horno y fritos), tan exitosos como los tradicionales.
Así han concluido las fiestas en honor a San Blas de 2025. Las del año que viene, según esperan desde la cofradía y la asociación vecinal, “se celebrarán en la ermita una vez se realicen las obras de mantenimiento”.
Colaboración municipal
El final de las fiestas en honor a San Blas supone también la conclusión del ciclo de los Santos Viejos 2025, una ancestral tradición con la que el Ayuntamiento de Manzanares colabora año tras año para que se mantenga en el tiempo.“Estamos muy orgullosos de que en nuestro municipio se sigan cultivando estas tradiciones tan arraigadas”, comentó la concejala Laura Carrillo, que agradeció el trabajo “de hermandades, centros educativos, asociaciones vecinales y de todas las personas que han colaborado en la organización de estas fiestas”.