El ciclo de ponencias técnicas de la 51ª Feria Regional del Campo y Muestras de Castilla-La Mancha (FERCAM) que se celebra en Manzanares comenzó este miércoles con una mesa redonda en la que diferentes expertos del sector vitícola expusieron las muchas y variadas posibilidades que existen para la exportación. En lo que coincidieron todos es en la necesidad de una organización que aúne los respectivos intereses de cada uno de los subsectores existentes alrededor de la viticultura.
Consciente de que el vino constituye el puntal de las exportaciones de Castilla-La Mancha y de que el futuro está en vender fuera de nuestras fronteras, el laboratorio agroalimentario LIEC y Central Enológica, con la colaboración del Ayuntamiento de Manzanares, organizó en FERCAM una mesa redonda para analizar las posibilidades de exportación de todos los productos derivados de la uva, un tema que la concejal responsable de la Feria, Dolores Serna, resaltó en la inauguración del ciclo.
Moderada por Vicente Sánchez-Migallón Sánchez-Gil, la mesa redonda comenzó con la participación de Román Cantarero, presidente de Azumancha, que habló de las posibilidades exportadoras del zumo de uva, “un producto líder en Castilla-La Mancha y con grandes posibilidades de futuro”. Cantarero abundó en la necesidad de cambiar el concepto peyorativo de mosto por el de zumo de uva, para lo que pidió una modificación legislativa que incluya a este producto dentro de los zumos. Explicó que el zumo de uva español llega a más de 60 países y que tiene más prestigio fuera que dentro, por lo que pidió dar más valor al zumo de uva por su facilidad de comercialización. Para ello abogó por hacer una indicación de calidad en Castilla-La Mancha aprovechando que la uva airén es 100% vitivinífera e ideal para el zumo, cuyo auge auguró “impresionante”.
Luis Jiménez, presidente de la Asociación de Enólogos de Castilla-La Mancha, habló de mercados muy interesantes para los vinos españoles, como Estados Unidos, donde hay una generación joven que bebe vino “porque es fashion”; el Reino Unido, con gran especialización y donde un premio abre la distribución; así como Alemania, Escandinavia y Rusia, aunque tuvo sus recelos respecto al mercado Chino “porque es un mercado latente pero peligroso”, ante el riesgo de que empiecen a producir falsificaciones. Dijo que el buen vino gusta en todos sitios y que no se puede ir a vender por todo el mundo y olvidarse del mercado interior. Según Jiménez, para exportar hay que estar preparado. Por último, calificó de vergüenza “el expolio de viñedo viejo” que se ha hecho con las políticas de arranque, ya que los vinos que triunfan en los mercados internacionales son los que tienen personalidad, procedentes de viñas viejas.
En representación de los productores, Fernando Villena, presidente de ASAJA en Castilla-La Mancha, pidió que el sector vitivinícola tuviera una organización ante sus muchos nidos de mercado: zumos, vino, alcoholes, etc. Después pidió a los enólogos que sean menos sibaritas “y no haga falta tener un libro para saber si lo que se bebe está bueno”. “Lo que hace falta es que el vino esté bueno y al consumidor no le cueste un dineral en un restaurante”, añadió Villena, quien dijo que las políticas de arranque han compensado los bajos precios que se pagan a los productores. Y es que, según el presidente regional de ASAJA, “Castilla-La Mancha no puede ser el mercado más barato de España”.
El siguiente ponente fue Ángel Villafranca, presidente del Consejo Sectorial del Vino de Cooperativas de España. Dijo que éstas son el pulmón del mundo vinícola, pero coincidió el que al sector le hace falta estructurarse “aunque una interprofesión es muy difícil que funcione”, expuso. A su juicio, la competencia de una cooperativa hoy no son los mercados extranjeros y sí la del pueblo de al lado, con 220 cooperativas en Castilla-La Mancha que venden el mismo producto. “Si no somos capaces de estar integrados en grupos comerciales fuertes, seguiremos haciéndonos la competencia”, señaló Jiménez, quien auguró una próxima campaña que, como la de 2010, va a tener falta de producto por el arranque y el aumento de la demanda, muy lejos del máximo de excedentes del año 2004, de ahí que los precios por la uva puedan ir al alza.
Otilia Romero de Condés, directora de la feria World Bulk Wine Exhibition que esta empresa manchega organiza en noviembre en Ámsterdam, habló de la alternativa de futuro que supone el vino a granel en los mercados internacionales, ya que su precio está subiendo más que el del envasado en exportación. Sin embargo, dijo que España es el país que menor precio medio tiene del litro de vino a granel. Los mercados que más compran a granel son Alemania, Francia, Estados Unidos y el Reino Unido, sin olvidar a Rusia, que de los 83 millones de litros que importó el último año, más del 50% los compró a España, que es el primer país exportador en volumen. Según Romero, hay un mercado internacional del vino a granel al que hay que ir a vender y a defender el precio si el producto es bueno. En este sentido resaltó la importancia de la feria internacional que dirige y que este año se celebrará el 21 y 22 de noviembre.
María Isabel Mijares, miembro de la Academia Española de Gastonomía y presidenta de la Federación Española de Periodistas del Vino, dijo en su intervención que la competencia no es la bodega de al lado. “Son los países terceros, con un peso enorme, terrenos muy adecuados y gran capacidad de producción”, explicó. Según la prestigiosa ponente, frente a una legislación muy restrictiva en España, en esos países (como Argentina o Chile), existe una ausencia total de restricciones y se da un gran protagonismo al viticultor. “Son productores desinhibidos, sin limitaciones, que se adaptan al gusto de los consumidores de todo el mundo y son los que nos hacen pupa en los mercados”, concluyó Mijares.
Por último, Francisco Ligero, como Presidente de la Asociación de Destiladores de Vino, dijo que los aguardientes son otra importante elección de exportación. Además explicó que a la uva le pasa como al cerdo, “se aprovecha todo”. Por ello destacó esa “diversificación” a raíz del racimo de uva como origen. Con la destilación se puede obtener alcohol de uso de boca, bioetanol, combustibles sólidos, aceite de las semillas o biogás. El problema, a su juicio, es que el sector no existe como tal, “se trata de una suma de subsectores en los que la competencia somos nosotros mismos”, indicó. Finalmente reclamó el apoyo del mundo de la viticultura ante el fraude que a su juicio está cometiendo Francia en la fabricación de aguardientes con orujos y lías.
El concejal de Agricultura del Ayuntamiento de Manzanares, Manuel Martín Gaitero, clausuró la jornada. Excusó a María Luisa Soriano, quien comprometió su presencia antes de ser nombrada Consejera de Agricultura. El edil felicitó a los organizadores y, como técnico en la materia, dijo estar de acuerdo en diversificar productos y que sea el sector el que debe buscar sus propias soluciones y alternativas de mercado sin fiarlo todo a las políticas vitivinícolas.