El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, asistió ayer en Tomelloso al acto de entrega de la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo al empresario Ángel Rodríguez Losa, fundador de ANRO, al que puso como ejemplo de los “luchadores imprescindibles” que, dijo, toda sociedad necesita.
En un emotivo acto que se celebró en la sede de la empresa, Barreda recordó unos versos de Bertolt Bretcht acerca de la lucha de los hombres en los que el autor reconoce que son “los que luchan toda la vida los imprescindibles”, al tiempo que puso en valor toda una trayectoria, “una vida ejemplar” que se ha desarrollado a lo largo de setenta años.
En este sentido resaltó los recién cumplidos 77 años de Ángel Rodríguez y destacó la larga trayectoria laboral de este empresario tomellosero que comenzó a trabajar con tan sólo siete años junto a su padre.
“Estar durante setenta años trabajando supone recorrer un largo camino”, señaló el presidente que recordó cómo ANRO se ha desarrollado desde sus humildes orígenes hasta convertirse en una espléndida realidad reconocida tanto en España como en todo el mundo.
Barreda subrayó que esta empresa familiar especializada en estructuras metálicas cumplió en 2009 cincuenta años de vida, y ha pasado de una plantilla de 10 trabajadores en los años setenta a 230 personas en la actualidad.
“Esa semilla que tan bien ha fructificado tuvo su origen en una fragua en la que empezaste a trabajar con siete años hasta conseguir algo muy hermoso”, señaló Barreda que aseguró sentirse muy orgulloso ante las muestras de cariño que todos los asistentes al acto demostraron al galardonado durante todo el acto.
Por su parte, Ángel Rodríguez, muy emocionado, dedicó al presidente sus primeras palabras de agradecimiento, así como a sus familiares y amigos a los que quiso reconocer su constante apoyo.
El hijo de Ángel Rodríguez, Rafael, destacó la labor de su padre, un emprendedor nato, manchego, del que, dijo, “tanto hemos aprendido”. Según afirmó, es un exponente vivo de la evolución y el desarrollo de esta tierra y de la propia empresa, al tiempo que resaltó la dedicación que ha mostrado a su trabajo durante toda la vida.
También estuvo en el homenaje el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, que recordó que esta medalla ha sido concedida para reconocer una trayectoria laboral y empresarial en la que, añadió, se ha fomentado el amor por el trabajo bien hecho, la tenacidad, el compromiso con los demás, y la creación de riqueza.
Díaz-Cano destacó además el impulso del presidente Barreda para la concesión de este reconocimiento al fundador de una empresa puntera que “no sólo genera empleo en la región, sino que proyecta el nombre de Castilla-La Mancha y de Tomelloso en el ámbito nacional e internacional.
La Medalla de Oro al Mérito del Trabajo, condecoración española de carácter civil, se concede en mérito de una conducta útil y ejemplar en el desempeño de cualquier trabajo.
En esta edición el Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio de Trabajo e Inmigración, ha concedido 34 medallas a título individual a trabajadores de distintos sectores, y una medalla colectiva. Otra castellano-manchega, Carmen Hombrados (nacida en Valdenoches, Guadalajara), responsable del Banco Provincial de Alimentos de Guadalajara, ha sido también galardonada.