La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Castilla-La Mancha ha solicitado que amplíe hasta el 15 de mayo el plazo para presentar la solicitud unificada de la Política Agraria Comunitaria (PAC), que finaliza el próximo 30 de abril, para que los agricultores y ganaderos tengan tiempo suficiente para solicitar dichas ayudas, teniendo en cuenta que el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, ya está trabajando en un borrador de orden para dicha ampliación.
La Organización Agraria argumenta que son muchas las razones, ajenas a la voluntad del agricultor, que impiden hacer la solicitud en tiempo y forma.
«Así, hay que tener en cuenta que algunas ayudas agroambientales, como la dedicada al girasol de secano, ha sido publicada el día 19 de abril en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha.
Además, para percibir la ayuda de algunas medidas agroambientales, es obligatorio presentar un plan de explotación con las solicitudes anuales y/o iniciales. Una obligación que ha sido comunicada a las entidades colaboradoras apenas hace unos días y cuya elaboración requiere de mucho tiempo, pues se trata de un documento técnico minucioso que debe estar preparado antes de la solicitud. De este modo, aquellas solicitudes que ya estén registradas o remesadas, deberán repetirse incluyendo dicho plan, lo que se traduce en la ralentización y el aumento de trabajo por parte de los técnicos de las entidades colaboradoras.
Por si esto fuera poco, la aplicación informática necesaria para presentarlas, no ha estado a disposición de las entidades colaboradoras desde el inicio del plazo de presentación, por lo que el periodo inicial ha sido reducido aun más».
ASAJA de Castilla-La Mancha considera que las ayudas que perciben los agricultores y ganaderos de la región son imprescindibles para que puedan mantener sus explotaciones y que, por ello, se deben facilitar todos los aspectos de la tramitación para que ni un solo profesional del campo se quede sin ellas. Además, la Organización Agraria recuerda que estas ayudas son una inyección de liquidez para la economía de la región, por lo que la Administración debe hacer todo lo que esté en sus manos para que no se pierda ni un euro de las ayudas comunitarias.