En un claro ejemplo de la imposibilidad de poner fronteras físicas o idiomáticas a la poesía, este fin de semana han llegado hasta Argamasilla de Alba, desde la Occitania francesa, cuna del lirismo, de la canción y del cortes amor, el Catedrático e Hispanista Jacques Cohen junto con los trovadores Pierre Chauchard y su esposa Arlette para rendir desde Francia un sentido y querido homenaje al poeta local, de elección aunque no de nacimiento, Pascual Antonio Beño Galiana.
Junto a ellos llegaron un grupo de más de cincuenta viajeros de Sagunto, relacionados con el hermanamiento Millau (ciudad francesa perteneciente al departamento de Aveyron) y Sagunto (Valencia), para visitar esta cervantina villa, cuna del quijote, y la Cueva de Medrano.
Rodolfo Mateos, ex presidente de los Académicos de la Argamasilla, fue el encargado de darles la bienvenida a la “meca discutida e indiscutible del mundo cervantino”. A Mateos le siguió Jacques Cohen, que aseguró estar particularmente conmovido de encontrarse en un lugar donde “hace medio siglo descubrí La Mancha y a Pascual Antonio”, y continuó diciendo, “mis estancias otoñales me han marcado durante toda mi vida. Pascual se ha ido pero su obra sigue germinando en nuestra memoria”.
Ya en el año 1961 este estudiante de letras de la Universidad de Montpellier, becado por la misma para preparar una tesis en España, eligió Argamasilla de Alba como lugar ideal para documentarse sobre los ‘Caminos del Quijote’.
Cohen también informó que han sido los primeros en realizar una “armonización” de los poemas de Beño, “lo que indica nuestro respeto y admiración”.
Entre los viajeros se repartieron varios poemas de Beño para que los pudieran cantar junto a Pierre Chauchard y su guitarra, entre ellos se encontraban “Esa incierta eternidad”, “Gracias por haberos conocido”, dedicada al Grupo Aldaba, y una parte de “Cantos a la destrucción de Sodoma”.
Además aprovecharon la ocasión para visitar la exposición permanente de Gregorio Prieto en el Centro Cultural “Casa de Medrano”.