El viceconsejero de Educación, Pedro Pablo Novillo, se ha reiterado este miércoles en Daimiel que “no se van suprimir las aulas de Educación Especial ya que la recientemente aprobada ley regional de Educación garantiza la permanencia de este recurso”. Este es el “mensaje de tranquilidad” que han querido trasmitir personalmente tanto él como el director general de Participación e Igualdad de la consejería, Carlos Ayala a las familias de la provincia cuyos hijos se integran en estas Aulas, caso del daimieleño colegio San Isidro.
En la reunión celebrada en el salón de plenos del Ayuntamiento, Novillo ha aclarado que la eliminación de su status jurídico no tiene otra intención que la de agilizar el proceso de “crear las aulas allí donde haga falta”, sin menoscabo de las actuales. “El lenguaje administrativo puede inducir a equivocaciones, y quizá hayamos fallado en la comunicación de esta decisión”, indicaba. Así las cosas, insistía, en que se trata de una mejora en la eficacia de los recursos y lo ejemplificaba con las prestaciones de una línea de autobús. “No tendría mucho sentido mantener jurídicamente un trayecto donde no hay viajeros y dejar sin atender otras zonas que demanden ese servicio”, comentaba.
La actual alcaldesa en funciones, Cristina Maestre, daba la bienvenida y agradecía el interés mostrado por Novillo y extendía esas mismas palabras a los dos portavoces de los grupos municipales de la oposición, Leopoldo Sierra del Partido Popular y Galo Sánchez Bermejo de Izquierda Unida, que entre el público también han participado de la reunión. El lunes, en sesión plenaria, todos los concejales de la Corporación apoyaban una moción en defensa de estas aulas de educación especial tanto en el colegio San Isidro como en el resto poblaciones donde se ubican.
