A través de una jornada de intercambio cultural donde obsequió a representantes del tejido asociativo y representativo de Daimiel con una serie de dulces y productos gastronómicos típicos de la comunidad musulmana y explicó los objetivos de la asociación.
La asociación cultural islámica entre residentes en Daimiel ‘Acierda’ se presentó este sábado en sociedad con una jornada de intercambio cultural que se inició poco después del mediodía con la exposición de la gastronomía musulmana. Dulces, té y productos típicos, entre ellos, cordero y kuskús, se sirvieron sobre la mesa para recibir a unos comensales que representaban buena parte del tejido asociativo y representativo de la localidad.
A escasa distancia y tan solo separado por un paño de grandes dimensiones, la Mezquita donde pueden rezar el Corán los casi 700 musulmanes que residen en el municipio, cifra que se duplica si se cuentan aquellos itinerantes, según indicó el presidente de ‘Acierda’, Abdeyabbar Aboufiras. Pero además, la instalación alberga un aula para la enseñanza de ambas tradiciones.
La jornada del sábado persiguió incidir en el marco de la convivencia entre ambas culturas, la daimieleña y la musulmana de residentes en el municipio, un acercamiento en el que se explicó los fines y actividades de la asociación, entre ellas se persigue el desarrollo de una biblioteca con la cultura islámica y la programación de charlas, seminarios y exposiciones para aquellas entidades públicas o privadas que estén interesadas en llevarlas a cabo.
Abdeyabbar lleva 30 años residiendo en Daimiel pero considera que es necesario esta iniciativa de una asociación con más de dos años de solera. Un hermanamiento basado en la cultura árabe que, recalcó el presidente de la asociación, “es sinónimo de hospitalidad”
En la mesa presidencial acompañaron el representante de la Comunidad Musulmana en Tomelloso, Juan Antonio Ruiz, y el alcalde de Daimiel, José Díaz del Campo.
Ruiz destacó de esta jornada de integración la importancia del encuentro entre culturas, pensamientos y sentimientos de dos comunidades que viven juntas y están totalmente mezcladas e integradas. “El respeto, tolerancia y convivencia es lo importante ya que evidencia que es una experiencia real y viable”. Ruiz concluyó que “el diálogo, encuentro y la convivencia, comentó es fundamental”.
El alcalde de Daimiel, José Díaz del Campo, cerró el turno de intervenciones recalcando que la diversidad bien armonizada y conjuntada permite el enriquecimiento de culturas, caso de esta jornada de cooperación.
En opinión del primer edil el hecho de compartir culturas ha dejado una herencia entre los musulmanes y españoles muy “enriquecedora”. Díaz del Campo subrayó las “voluntades” y el “calor humano” de la comunidad de marroquíes.
El hermanamiento, previsiblemente, se repetirá en posteriores ocasiones.
