Cincuenta botijos procedentes de todos los puntos de España han pasado a formar parte, durante diez años, de los fondos del Museo de la cerámica manchega, el FORMMA, en virtud de una donación de Julia Morales Castellanos, esposa del preparador físico deportivo Manuel Delgado Meco.
Medio centenar de botijos pertenecientes a la colección privada de una alcazareña, Julia Morales Castellanos que lleva muchos años viviendo en Bilbao junto a su marido Manuel Delgado Meco, alcazareño predilecto, y que ha decidido donar esta colección al Museo de la alfarería de su ciudad natal para que todos sus paisanos puedan disfrutar de ella.
Aficionada a la alfarería, Julia comenzó en los años 80,a atesorar estas piezas clásicas de la cerámica adquiriendo desde las más tradicionales hasta otras más innovadoras, en cada uno de los lugares a los que viajaba. La colección recoge botijos de todos los puntos de la geografía española, sobretodo de la zona de Cuenca, pero también de Toledo, Lérida, Valencia o Alicante además de algunas piezas de Portugal o México entre otros lugares. La pieza más antigua corresponde a principios del siglo XX, un botijo vidriado, coloreado en tonos pastel de muy esmerada fabricación que representa una cesta de frutas e incorpora la leyenda «Recuerdo de Alicante». El resto de los botijos son más actuales pero muy diferentes entre sí, con distintas formas, como figuras de animales como el gallo y el toro, y decoraciones típicas de la zona a la que pertenecen.
Esta interesante muestra que pasa a formar parte de los fondos del Museo por un período de 10 años, se encuentra expuesta en la sala de exposiciones temporales del Museo Formma y puede visitarse hasta el 30 de diciembre.