El presidente regional, Emiliano García-Page, ha reclamado este viernes una reflexión sobre el modelo de agricultura ecológica acorde con el crecimiento que se ha producido en Castilla-La Mancha, una tierra “que lleva dando ejemplo desde hace mucho tiempo por encima de las demás”. En este sentido, ha recordado que el próximo 18 de abril mantendrá un encuentro en Bruselas con el comisario de Agricultura, Janusz Wojciechowski, y que intervendrá en el Comité Europeo de las Regiones.
Acompañado por el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, este encuentro servirá para solicitar que se incluya la agricultura y la ganadería ecológicas en el primer pilar de la Política Agraria Común (PAC) para que las ayudas a este sector no dependan de los fondos del Programa de Desarrollo Rural de las comunidades autónomas.
Así lo ha señalado el presidente castellanomanchego durante el acto de conmemoración del 40 aniversario de la Cooperativa Agraria San Antón, empresa productora de semillas certificadas que agrupa a agricultores que cultivan unas 15.000 hectáreas en regadío y otras 50.000 de secano, donde ha apuntado que “estamos en un proceso de transición ecológica. Estamos hablando de transición, no de revolución”, ha considerado.
En este sentido, García-Page ha defendido nuevamente la importancia que para la región tiene las decisiones que se adoptan en Europa. “Hay quien dice que Europa es el problema, pero Europa siempre ha sido la solución y lo sigue siendo, hoy más que nunca”. A su juicio, los contenedores nacionales “se han quedado pequeños y Europa no es que sea conveniente, sino que es imprescindible”.
España necesita un mayor “espíritu cooperativo”
Durante su intervención, García-Page se ha declarado un “firme defensor” del modelo cooperativo, “no solo para el modelo agrario, sino para modelo vivienda y tantas cosas. No tiene nada de malo juntar esfuerzos”, ha considerado el presidente, antes de asegurar que “este modelo no estaba bien visto antes, pero nos hemos ido quitando telarañas ideológicas”.
Así, y en referencia a la Cooperativa Agraria San Antón, ha considerado que supone “un ejemplo y una referencia solvente por su gestión, volumen y nivel de equilibrio”, por lo que una trayectoria de cuatro décadas “es un gran motivo de celebración”.
En este mismo contexto, y tras defender que el modelo cooperativo permite repartir tanto el éxito como las dificultades, y que “la mayoría del sector cooperativo ha soportado mucho mejor las inclemencias económicas”, ha asegurado que “a este país le vendría muy bien un poquito de espíritu cooperativo, se echa en falta”, especialmente en el ámbito político, ha lamentado, a diferencia de lo que ocurre en Castilla-La Mancha, donde un Gobierno en mayoría “me invita a hacer una gestión lo más cooperativa posible y a contar con todos los sectores”.
El peso cada vez mayor de la agricultura castellanomanchega
El presidente autonómico no ha querido finalizar su intervención sin poner en valor el peso de la agricultura y su evolución en la economía regional. “El campo de hoy nada tiene que ver con el de hace cuarenta años”, ya que actualmente Castilla-La Mancha cuenta con una “enorme industria agroalimentaria que parte de la transformación y producción aquí mismo”.
Asimismo, ha señalado que, sin bien “nosotros queremos tener la máxima industria posible, y tenemos un sector servicios en potencia y creciente que no va a dejar de crecer, especialmente con el turismo”, la región cuenta con el sector primario de gran importancia, “que hoy pesa más en la renta que hace cuarenta años, y en un contexto de mayor crecimiento”.
En este acto han acompañado al presidente el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán; el presidente del Consejo Rector de la Cooperativa, Antonio Melgarejo; el presidente de la Diputación Provincial de Albacete, Santiago Cabañero y el alcalde albaceteño, Manuel Serrano, entre otras autoridades.