El 16 de diciembre de 2008, y tras interminables conflictos con las licencias, se inauguraba oficialmente en Ciudad Real. Un año y medio después de la inauguración del Aeropuerto de Ciudad Real, anunciado como primer aeropuerto privado de España, comienza a cobrar fuerza la opción de que esta infraestructura, en situación de semi-ruina y con dos demandas de concurso de acreedores a sus espaldas, se convierta en un aeropuerto público.
Todo ello se debe al cambio de estrategia y de discurso oficial del PP con María Dolores de Cospedal a la cabeza. Tradicionalmente, el PP se ha limitado a criticar los mil y un favores que la administración de Barreda ha hecho a los empresarios del Aeropuerto, algunos de los cuales mantienen una estrecha amistad con el presidente de Castilla-La Mancha. El enésimo favor tendrá lugar previsiblemente la semana que viene, cuando las Cortes de Castilla-La Mancha aprueben un aval de 140 millones de euros que el Aeropuerto empleará en llevar a cabo sus próximas inversiones.
Ni que decir tiene que este aval nunca ha hecho gracia al PP, que ha venido acusando frecuentemente a Barreda de beneficiar a sus amigos empresarios y dejar de lado al resto de ciudadanos. Pese a la seria amenaza de quiebra del Aeropuerto y pese a que éste es considerado en numerosos círculos como una de las causas de la intervención de Caja Castilla La Mancha, el PP no acababa de conseguir que su crítico discurso encajase en la sociedad castellano-manchega, que no veía con buenos ojos unas palabras que echaban abajo la infraestructura sin aportar alternativas.
Sin embargo el PP ha cambiado de actitud y, sobre todo, de discurso. Ante la inminente aprobación del aval y las irremediables encuestas que siguen sin colocar bien al PP frente a sus votantes en la región, el equipo de Cospedal ha optado por cambiar de estrategia y pedir que el Aeropuerto deje de ser privado y se convierta en una empresa pública. O, al menos, mixta. El diputado regional Marcial Marín ya adelantaba esta semana que el PP vería con buenos ojos que esta infraestructura se convirtiese en una empresa pública que dependiese enteramente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Cospedal también se mojaba ayer: «Si al final el Aeropuerto de Ciudad Real le va a costar dinero a la Junta, que sea la región la propietaria como un bien público y así todo el dinero vaya a redundar en beneficio del aeropuerto».
En términos similares se mueve la propia alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, también del PP, que este jueves decía que el aval de 140 millones “es sólo un parche que sirve para que subsista, como mucho, un año”. Para la alcaldesa, el Aeropuerto –en el que, por cierto, trabaja su propio marido como director de marketing- tendría que hacer “una ampliación de capital” para “que la Junta de Comunidades entre en esa ampliación y lo asuma como entidad pública”.
Así pues, el PP ha cambiado en apenas unas semanas de opinión en cuanto al aval. Lo que hace poco tiempo era “un regalo de Barreda a sus amigos empresarios”, ahora es “sólo un parche, ya que el Aeropuerto necesita muchísimo más que 140 millones de euros”.
Nada nuevo bajo el sol
La posibilidad de que el Aeropuerto de Ciudad Real se convierta en una empresa pública no es tan remota ni disparatada como pudiera parecer. Y es que la historia de este aeropuerto está ligada a las enésimas aportaciones y entradas de capital procedente de las arcas públicas:
1.- Accionistas. Entre los accionistas del Aeropuerto encontramos a varias sociedades y empresarios, pero sobre todo lo que abunda son las instituciones públicas: la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, la Diputación de Ciudad Real, la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) o CCM, entre otros.
2.- Ayudas a fondo perdido. Al margen de las acciones, a las que se les debería presuponer un retorno de inversión, instituciones como la Junta, la UCLM o los ayuntamientos de Ciudad Real y Puertollano han programado, a lo largo de varios años, ayudas económicas por valor de más de 40 millones de euros. No se espera retorno de todas estas cantidades, ya que sus propios emisores las calificaron de ayudas a fondo perdido.
3.- Préstamos a empresarios. La intervenida Caja Castilla-La Mancha (CCM) no sólo ha perdido dinero como accionista, sino también al haber concedido préstamos a varios de los empresarios propietarios del Aeropuerto. Entre éstos se encuentran Domingo Díaz de Mera, Ignacio Barco y Román Sanahuja, un trío empresarial que ahora mismo colecciona sociedades en quiebra y que debe cerca de 600 millones de euros a CCM.
4.- Financiación de la línea de transporte. El Aeropuerto está a medio camino entre Ciudad Real y Puertollano, dos localidades entre las que se colocó una línea de autobús que para en el Aeropuerto y que realizaba un trayecto cada hora. Esta línea, sin apenas pasajeros, fue habilitada por el Ayuntamiento de Ciudad Real merced a una decisión que le enfrentó al consorcio de empresas de transporte, que le recordaron que un Ayuntamiento no puede habilitar líneas de autobuses entre dos localidades.
5.- Expropiación de terrenos. Hace años, el Aeropuerto de Ciudad Real fue calificado como Proyecto de Singular Interés (PSI), una calificación que no sólo exime del pago de diversas tarifas administrativas, sino que además permite la expropiación de terrenos. La Junta de Castilla-La Mancha y el Aeropuerto pagaron a los dueños de estos terrenos rústicos entre 0,54 y 4,5 euros por metro cuadrado.
6.- Ley del Suelo. La Junta de Castilla-La Mancha aprobó el 14 de mayo de 2009 la Ley de Ordenación del Territorio y la Actividad Urbanística (LOTAU). Esta ley permitirá que el suelo del Aeropuerto (que ahora mismo es rústico) pueda ser recalificado y reparcelado para ser vendido como suelo industrial. Mientras el Aeropuerto pagó entre 0,54 y 4,5 euros por cada metro cuadrado de suelo rústico, su recalificación como industrial situaría al metro cuadrado en un precio de más de 60 euros.
7.- ‘Subvención’ a las compañías que operan en el Aeropuerto. El Aeropuerto comenzó sus actividades con vuelos de Air Nostrum y Air Berlín. Air Nostrum paró sus actividades en septiembre de 2009 debido a los malos resultados. Air Berlín tiene resultados muy semejantes, pero en julio del año pasado la Junta de C-LM le concedió nada menos que 350.000 euros en concepto de “promoción del patrimonio cultural, histórico, artístico y cinegético de Castilla-La Mancha en sus aviones y en los destinos donde opera”. No parece haber sido suficiente, ya que Air Berlín ha anunciado su marcha del Aeropuerto, que se afana en atraerla con negociaciones de última hora.
8.- Consorcio de apoyo financiero. En marzo de este año se anunciaba la creación de un consorcio que inyectará dinero al Aeropuerto. Este consorcio, comandado por la Junta, estará formado también por la Fundación Aeropuerto de Ciudad Real, la CEOE-Cepyme, Caja Castilla-La Mancha (CCM), la Cámara de Comercio de Ciudad Real, la Diputación de Ciudad Real y los ayuntamientos de Ciudad Real, Puertollano, Daimiel y Almagro. A excepción de los dos últimos ayuntamientos, el resto de instituciones ya son accionistas del Aeropuerto o han concedido varias ayudas económicas a fondo perdido.
