La compañía Teatro Negro de Praga con “El Barón de Munhaussen”, dirigida por Pavel Marek, cautivó al público del Gran Teatro en la tarde del sábado con un espectáculo para grandes y pequeños. Sus componentes utilizaron una técnica particular basada en un escenario sumido en la más completa oscuridad donde con la única presencia de una luz ultravioleta, permitió configurar un espectáculo visual insólito.
Las Aventuras del Barón Munchausen, que llegaron el sábado al Gran Teatro de la mano de la compañía Teatro Negro de Praga, intentaron plasmar cómo se podría vivir en un planeta limpio sin contaminación y con bosques verdes aguas claras en sus ríos, mares y océanos…
La historia que presentó la compañía Teatro Negro de Praga en Manzanares se inicia en una sala de un hospital psiquiátrico donde el enfermo guía al doctor en excursiones fantásticas, tan divertidas y locas como “Las aventuras del Barón Munchausen”, en este caso, el punto de referencia para el desarrollo de la representación. Paciente y joven doctor hacen viajar al público a países exóticos y mundos curiosos hasta llegar al espacio.
El director de la compañía, Pavel Mareck , dijo que mediante la magia y los trucos del Teatro Negro y con una serie de efectos multivisuales únicos, de películas de dibujos animados y de ficción, el grupo checo hace una travesía por las profundidades de los océanos y realiza un vuelo en una bala de cañón en medio de cruentos combates, entre otras aventuras.
En el montaje ofrecido en Manzanares, sus componentes utilizaron una técnica particular basada en un escenario sumido en la más completa oscuridad donde con la única presencia de una luz ultravioleta, permitió configurar un espectáculo visual insólito. Así, aparecieron desde habitantes de la Luna, ballenas o pulpos gigantes, hasta bailarinas del harén del sultán Suleimán.
Para el director de la compañía checa, el espectáculo está dirigido a todos los públicos “porque al no tener lenguaje oral y utilizar la música como hilo conductor así como la magia visual, puede representarse en cualquier parte del mundo. Nuestro espectáculo no tiene fronteras”, señala.
Mareck dijo que no era la primera vez que Teatro Negro de Praga actuaba en Manzanares. Recordó que en 2005, su compañía representó “Las impresiones de Don Quijote”. El director de la compañía checa resaltó el carácter del público español que está acogiendo el espectáculo muy gratamente.
