La 12ª Concentración Nacional de Motos Clásicas reunió este domingo en Daimiel a 70 máquinas que, antes de hacer parada al mediodía en la Plaza de España, pasaron por Villarrubia de los Ojos, Las Labores, Arenas de San Juan y el Parque Nacional de Las Tablas. El recorrido, “acompañado de buen tiempo y sin más incidencias que algún que otro pinchazo”, concluyó en el restaurante de Las Brujas, donde tras la comida de hermandad se procedió a la entrega de diversos reconocimientos.
Así, el premio a la moto más antigua, se lo llevó un sidecar BMW de 1.941, el modelo que utilizó el ejército alemán en la II Guerra Mundial. La distinción a la “más llamativa” recayó en una Nimbus de 1.952, moto de fabricación holandesa y de la que se hicieron muy pocas unidades. En cuanto a los premios para los motoclub participantes, ambos se fueron a Murcia. El de San de Pedro Alcantara se llevo el galardón al venido desde más lejos y el de San Javier al que aportó más moteros.
Pasada esta cita, el Motoclub Brujas, organizador del evento, prepara ya sus próximas concentraciones en Calzada de Calatrava, Albacete, Manzanares y La Solana