Mil doscientos estudiantes de secundaria, bachillerato y FP de los colegios Salesiano, María Inmaculada y San José han participado en la lectura del manifiesto y en el reparto del bocadillo solidario promovida por el Arciprestazgo de Puertollano y el Valle de Alcudia que colabora con Manos Unidas en el desarrollo de un proyecto para la mejora de la calidad educativa de niños palestinos con discapacidad auditiva en Belén en Palestina.
Alumnos de cada uno de los centros participantes han dado voz a las reivindicaciones de Manos Unidas de la iniciativa “El efecto ser humano”, han realizado una performance en el escenario de la Concha de Música y han levantado un mar de manos azules al cielo de Puertollano.
Unidad para mejorar la situación del mundo
El alcalde, Miguel Ángel Ruiz, durante la lectura del manifiesto ha señalado que con el pequeño gesto de este millar de estudiantes hace posible que exista esperanza, que la vida pueda cambiar y mejore la situación del mundo.
Un día para la unidad de todos, dijo el alcalde, “de nuestras voces, nuestro corazón con un compromiso único de seguir luchando porque no haya hambre en el mundo, frente a la desigualdad y la injusticia y a favor de la inclusión”.
Superar la recaudación
Estudiantes de estos centros educativos se han sumado a la campaña “El efecto ser humano” con la compra de tickets de un desayuno a base de donut y botella de agua que han degustado a la hora del recreo.
El Arciprestazgo y Manos Unidas espera superar los 40.000 euros durante este año así incrementar el dinero conseguido durante el 2023 en el que se alcanzaron los 37.000 euros, ha explicado el párroco de San José, Pedro Antonio Rodríguez Menchén, que ha recordado que este proyecto de mejora educativa para chicos con discapacidad auditiva en Belén comenzó en 1971 de manos del Papa Pablo VI, en una iniciativa Pontificía de Roma junto al Patriarcado de Jerusalén.