CSI·F insiste en la necesidad de contención del gasto superfluo que realiza el Gobierno Regional vía televisión, publicidad, proliferación de empresas públicas, multiplicación de altos cargos, recolocación de políticos defenestrados, etc.
El sindicato recuerda que diversas Comunidades Autónomas de distinto signo están adoptando medidas serias y ejemplarizantes. La Junta de Extremadura propone, por ejemplo, la reducción del 30% de altos cargos y puestos de confianza, junto con la congelación de salarios de altos cargos durante 2010, 2011 y 2012. Por su parte, el Ejecutivo Gallego adelgazó la nómina de altos cargos un 50%, un 30% el número de asesores y suprimió diversas consejerías y muchas delegaciones provinciales.
Mientras, según CSI·F, en Castilla-la Mancha asistimos a nuevos episodios de irregularidades económicas con componendas políticas como las detectadas en la fundación Virtus que vienen a completar el mosaico integrado por el Aeropuerto de Ciudad Real, CCM y el Reino del Quijote, por poner algunos ejemplos.
CSI·F sigue señalando que “sin empleo no hay recuperación” y que ya está bien de perder el tiempo. Hay que tomar medidas razonables y eficaces tanto en Castilla-La Mancha como a nivel nacional.