Ni el frío ni las inclemencias meteorológicas iban a estropear la “Sardinada”, ya que estaba previsto que, en caso de que la lluvia impidiera su normal desarrollo, en lugar de realizarse en la Plaza del Gran Teatro, se trasladaría a los soportales exteriores del Mercado Municipal de Abastos.
La céntrica plaza manzanareña se abarrotó de todos aquellos que no quisieron perderse esta tradicional celebración. Los vecinos y vecinas esperaron pacientemente su turno, tras las vallas habilitadas para tal fin, para degustar las sardinas asadas con pan remojadas, eso sí, con vino blanco de la tierra.
En dos grandes planchas, los “Amigos del Carnaval”, ataviados especialmente para la ocasión de enterradores tradicionales, asaron noventa kilos de sardinas, que repartieron entre los allí presentes. También se sirvieron varios sacos de pan y cerca de sesenta litros de vino blanco, tal como explicó Mateo Sánchez de la Blanca.
Los “Amigos del Carnaval” han sido los encargados de organizar, así mismo, diferentes actos a lo largo de estas fiestas, destacando el Pregón inaugural. También corre a su cargo, junto al Área de Festejos del Ayuntamiento, el Entierro de la Sardina, tras el cual obsequian a todos los asistentes con pastas en forma de sardina. Esta agrupación se mostraba muy satisfecha con la participación popular en el acto de la mañana del Miércoles de Ceniza.
El público también estaba encantado con esta iniciativa y destacaba el buen sabor de las sardinas asadas. Algunos incluso no dudaron en repetir más de dos veces.
Finalmente, la lluvia se entremezcló con el sol e hizo acto de presencia en forma de pequeño chaparrón, aunque no logró enturbiar el buen desarrollo de esta celebración.