La unidad del PP

He leído con atención el artículo, enviado a diversos diarios provinciales, del concejal de Economía de la capital, Miguel Ángel Rodríguez. Con independencia de las opiniones vertidas contra las presumibles diferencias que pudieran existir entre los distintos gobiernos socialistas, algo que no puede calificarse como tales diferencias. Y con independencia también de las facilonas salidas de tono a las que nos acostumbra, por escrito o en sus intervenciones en pleno, me llama la atención el interés que tiene este cargo político local y regional de su partido, en afirmar que el PSOE es un todo y que no valen las diferentes opiniones que pudieran surgir.

No voy a discutirle lo que opine, porque no creo que le vaya a convencer sobre como la pluralidad de opiniones y el diálogo dentro de un mismo partido, enriquece no sólo al partido, sino las decisiones que se toman en beneficio del ciudadano. No creo que vaya a convencerle de que se demuestra, de esta manera, que el PSOE no obedece órdenes caudillistas, sino que sus decisiones en los diferentes ámbitos, obedece al interés general, compatibilizado con las particularidades que en cada territorio podemos encontrar. Pero eso de opinar, dialogar y no sólo obedecer es algo que en el PP no deben entender.

Tampoco me asombra el tono que el PP emplea en su discurso político, y reflejado en el artículo, ya que hace valer una Fuerza Nueva en su hacer, a pesar de sus intentos constantes por aparecer ante la opinión pública como un partido moderado y de centro. Esfuerzos, por cierto, baldíos.

Pero si el señor Miguel Ángel Rodríguez se atreve a formular la opinión publicada, es por su claro convencimiento de que el PP es una unidad en todos sus aspectos, y volviéndole su opinión por pasiva es fácil entender que no hay división posible, es decir, hay absoluto respaldo del PP de Rosa Romero al PP de Aguirre que llama “hijoputa” con despreocupación a quien le estorba. Y que respalda el espionaje en Madrid como arma lícita para defender los intereses del poder del PP. Entendemos que hay absoluto repaldo del PP de Rosa Romero al quehacer en contra de CCM de la señora De Cospedal, o que el PP de Ciudad Real está a favor del trasvase que el PP murciano y valenciano reclaman con insistencia haya o no haya reservas hídricas. Y entendemos que el PP de Rosa Romero, es la secretaria provincial no lo olvidemos, apoya a todos los imputados por el caso Gürtel y considera normal recibir regalazos a cambio de favores. Y por supuesto, entendemos que el ataque furibundo contra el aeropuerto de Ciudad Real por parte de De Cospedal, es plenamente respaldado y sin fisuras por el PP de la capital.

Y los ciudadanos, gracias a Miguel Ángel Rodríguez y a la Fuerza Nueva que esgrime su partido, ya lo tienen más claro. En el PP se obedece a intereses de poder del partido y punto. Si el ayuntamiento está en la ruina es lo de menos, y si los jóvenes de esta ciudad tienen que marcharse para encontrar empleo, les da igual. El PP tiene un sólo objetivo, coger el poder, y una vez que lo tengan, ya sabemos que en España podrán insultar, espiar, recibir regalos por favores, e ir contra todo lo que les estorbe sin importar los intereses de Ciudad Real ni de Castilla-La Mancha. Todo sea por Rajoy y Aguirre, VALE!