Lamata valora positivamente la primera reunión de la Conferencia Sectorial de Cooperación

El consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata reiteró ayer el firme compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha con la cooperación internacional al desarrollo y con los planes de actuación para la construcción de Haití tras el terremoto.
Así lo manifestó ayer el titular de la política sociosanitaria castellano-manchega momentos antes del inicio de la primera reunión de la Conferencia Sectorial de Cooperación, que preside el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos y de la que forman parte todas las Comunidades Autónomas, donde se abordaron diversas cuestiones relacionadas con el Plan de actuación previsto para 2010 y la situación de Haití.

Lamata, que felicitó al presidente Zapatero por mantener, a pesar de la crisis económica, el esfuerzo presupuestario con la cooperación, reiteró el firme compromiso del Gobierno de José María Barreda en esta área, y en concreto con los planes de actuación para la construcción de Haití tras el terremoto. En este sentido, subrayó que Castilla-La Mancha es la única comunidad autónoma que destina el 0,7% de los ingresos propios a cooperación al desarrollo.

Además, el consejero precisó que Castilla-La Mancha mantiene operativa una línea presupuestaria de 4,5 millones de euros para ayuda de emergencia en 2010. A través de esta partida se podrán financiar proyectos planteados por las distintas ONGDs para paliar la situación que sufren los ciudadanos de Haití tras el terremoto.

Asimismo, indicó que en estos momentos nuestra región está desarrollando un total de 6 proyectos de cooperación al desarrollo en esta zona del Caribe que se pusieron en marcha tras la destrucción que generaron los huracanes de 2008 con un coste que supera los 810.000 euros.

Fernando Lamata subrayó la importancia de la puesta en marcha de la Conferencia Sectorial que va a permitir sistematizar la cooperación al máximo nivel y en colaboración con los gobiernos autónomos porque posibilitará también un mejor seguimiento de las ayudas y proyectos que, en el caso de Haití, deben ser a medio y largo plazo e incorporando un nuevo modelo de desarrollo económico y social.

Para el consejero, el gran reto del siglo XXI recogido en los Objetivos del Milenio pasa por lograr erradicar el hambre, que nadie esté esclavizado ni laboral ni familiar ni socialmente y que los niños puedan desarrollarse con normalidad, un reto que a su juicio debe transformarse en realidades.

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