La Gerencia de Atención Integrada de Tomelloso, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha implantado un protocolo de lactancia materna en el recién nacido.
Se trata de un documento que contiene guías con información actualizada basada en la evidencia científica, además de técnicas, actuaciones, resolución de problemas y necesidades especiales más comunes que se pueden dar en esta materia.
Un equipo multidisciplinar de profesionales de diferentes categorías: enfermeros, auxiliares de Enfermería, matronas, pediatras y ginecólogas, de Atención Primaria y Hospitalaria, son los encargados de liderar un proyecto que tiene entre sus grandes objetivos fomentar la lactancia materna entre las madres de esta área sanitaria.
Todos estos profesionales pertenecen a la Comisión de Lactancia Materna, un grupo de trabajo que trata de mejorar la salud materno-infantil y que evidencia el compromiso de la Gerencia con la lactancia materna y con la humanización de la asistencia sanitaria.
“Estamos muy contentos con la implantación de este protocolo, siempre respetando la elección de los padres con respecto al tipo de alimentación del bebé”, recalca el director de Enfermería de la Gerencia de Tomelloso, Ismael Ropero.
Hay que recordar que la lactancia natural es una forma de proporcionar un alimento ideal para el crecimiento y el desarrollo sano de los lactantes; también es parte integrante del proceso reproductivo, con repercusiones importantes en la salud de las madres.
La evidencia científica ha revelado que, a nivel poblacional, la lactancia materna exclusiva durante seis meses es la forma de alimentación óptima para los lactantes.
Tal y como recuerda Ismael Ropero, “la lactancia materna aporta toda la energía y los nutrientes que el niño necesita en su primeros meses de vida y sigue cubriendo la mitad o más de las necesidades nutricionales durante el segundo trimestre y un tercio durante el segundo año”.
