La Coordinadora de Agricultores y Ganaderos–Iniciativa Rural (COAG-IR) de Castilla-La Mancha considera que los consumidores no tienen por qué pagar la ineficacia del MAPA y de los políticos en el control de la cadena de precios de los lácteos.
El responsable regional de la Sectorial de Leche de la organización agraria, José Luís Sáez, ha justificado esta afirmación en que el precio del litro de leche se multiplica por cuatro o cinco y casi por 10 los transformados (yogures,natillas…), mientras que los ganaderos apenas pueden mantener los costes de producción.
“ No se puede seguir permitiendo el enriquecimiento de la industria a costa de los productores y de los consumidores, que son los que siempre salen perjudicados por la permisiva política de precios de los productos lácteos”, asegura Sáez.
Asimismo, el dirigente agrario se ha referido al fracaso del contrato de la recogida de leche al que se negó COAG-IR y que se firmó el pasado 20 de julio entre el Ministerio y otras organizaciones agrarias, ya que el documento suscrito no garantizaba los costes de producción, una realidad que han constatado después de 6 meses.
El responsable sectorial de Leche ha explicado este despropósito con un ejemplo muy ilustrativo: “que en los lineales de los supermercados se colocara la leche de una de las primeras marcas del país sin precio, para que los consumidores pagaran, en función de su criterio, lo que consideraran oportuno por ella”, tal y como hace la industria con los productores de leche.
Sáez considera que la indefensión de los ganaderos frente a la industria no se puede mantener más tiempo y ha incidido en el gran esfuerzo económico realizado por los productores para modernizar sus instalaciones y garantizar la calidad y trazabilidad de un producto cada vez más devaluado por el sector industrial.