CSI·F argumentaba en ambas ocasiones que la distribución de personal sanitario adscrito a la UCI es sumamente importante, pero no menos lo es una plantilla adecuada de celadores, imprescindible para la atención, constante y delicada, que necesitan estos pacientes.
A juicio del sindicato independiente, cada turno de la UCI, debido al aumento de cargas de trabajo, debe estar dotado con un mínimo de 3 celadores/as, especialmente por las mañanas y por las tardes, cuando las pruebas clínicas son constantes, con movilización permanente de enfermos, así como por 2 celadores/as durante las 10 horas del turno de noche. Sin embargo, hasta ahora solo cinco celadores cubrían los tres turnos.
A primeros de diciembre, la Direccion recibió además un escrito en este mismo sentido que suscribían 111 trabajadores/as, entre ellos todos los de la UCI, quienes insistían en la necesidad de más celadores ante la saturación creciente del servicio y toda vez que se había ampliado anteriormente la dotación de personal de enfermería, para poder afrontar este aumento de cargas de trabajo y realizarlas con la calidad que se merecen los pacientes y el resto de trabajadores del servicio.
