En la provincia de Ciudad Real, la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología recoge, por nevadas, alerta naranja en las comarcas de La Mancha y del Valle del Guadiana y alerta amarilla en las comarcas de la Sierra de Alcudia y Madrona, en los Montes del Norte y Anchuras. También, se prevé alerta amarilla en toda la provincia por temperaturas mínimas que pueden alcanzar los seis grados bajo cero.
En Cuenca, la Agencia Estatal de Meteorología establece la alerta amarilla por temperaturas mínimas, con probabilidad de que lleguen a ocho grados bajo cero, y por acumulación de nieve en toda la provincia.
En la provincia de Guadalajara, se prevé alerta naranja por temperaturas mínimas, que podrían bajar hasta menos diez grados, en la Serranía. También, se establece alerta amarilla por temperaturas mínimas, que podrían alcanzar los nueve grados bajo cero, en las Parameras de Molina y la Alcarria. Por nieve, se establece alerta amarilla en toda la provincia.
Para la provincia de Toledo, la alerta es de nivel amarillo por riesgos de nevadas y por temperaturas mínimas, que podrían situarse en cuatro grados bajo cero.
Desde la Consejería de Administraciones Públicas y Justicia se recuerda que, ante las nevadas, se eviten las salidas o desplazamientos por carretera a no ser que sea imprescindible. En caso de que se emprenda un viaje, se recomienda informarse con anterioridad del estado de las carreteras y que los vehículos se hayan puesto a punto para el frío inminente, así como llevar cadenas, el depósito de combustible lleno, ropa de abrigo, comida dentro del vehículo y teléfono móvil con cargador.
Además, se aconseja no hacer ejercicios físicos excesivos y se recuerda a la población extremar la precaución a la hora de elegir el método de calefacción, tomando precauciones para evitar la intoxicación producida por braseros, estufas, carbón o gas en lugares cerrados y sin renovación de aire.
Asimismo, se recomienda elegir una vestimenta adecuada para el frío, especialmente en niños y mayores.
Castilla-La Mancha dispone del Teléfono Único de Urgencias 1-1-2 en el que se pueden comunicar las emergencias y del que se recuerda la necesidad de hacer un uso racional.
