El multitudinario desfile de grupos y asociaciones que precedía a la ofrenda de flores y frutos a la patrona de Ciudad Real, la Virgen del Prado, durante la celebración de la Pandorga, se demoró demasiado. La convidá a limoná y puñao, programada para las diez de la noche comenzó más de una hora después de lo previsto. También se retrasó, algo menos pues comenzaban a las once, los bailes folclóricos en los Jardines del Prado.
Sobre este asunto dirigió unas palabras el presidente del Cabildo de la Catedral, Bernardo Torres, al equipo de Gobierno. “Siempre a las nueve estamos ya aquí -refiriéndose a la llegada del desfile al templo- Tenedlo en cuenta para el año que viene, esta es la novatada”.
La Pandorga, comentó Torres, es la fiesta del encuentro con la madre. Es importante, “pero no solo para vivirla desde el folclore, desde lo externo”, matizaba. “A veces le damos más importancia por ejemplo a los concursos de limoná y otras cosas parecidas, y vemos cómo aparecen nuestros jóvenes manchados de vino hasta arriba, y muchos de ellos que se embriagan”, añadía. “Tenemos que tener cuidado con todas estas cosas”.
Lo externo, continuaba, “no es lo verdaderamente importante, no olvidéis que esta fiesta es la ofrenda que hacían vuestros antepasados a la Virgen. Lo hacían de una manera sencilla: al terminar un parte de las cosechas y antes de empezar la siega y la vendimia”.
El retraso en el desfile no es de ahora, es de años. Nunca ha empezado a la hora que decían.
Pos estamos apañaos, si estos son como los otros habemos hecho un pan como unas ostias…
Pues tengo que darle toda la razón, al Presidente del Cabildo, en todo su comentario.
El desfile fue interminable. Había bastante gente que desistió de verlo hasta el final, porque resultó cansadísmo. No es cuestión de hacer política sobre éllo, es simplemente la realidad.
No recuerdo si el pasado año, desfilaron la Asociación Cofradías de Semana Santa.
Lo que si es cierto, que hay «demasiado relleno», con lo que indudablemente queda deslucido.
Lo bonito son los trajes regionales, y con éllo por supuesto no me refiero a todo el mundo que vá vestido como de vendimiadoras, sino al traje de gala de manchega, que es lo que mas gusta, así como sus bailes. Resultó aburrido, y no quiero con éllo, culpar a nadie, pero si, que lo tengan en cuenta, tal y como ha dicho el Presidente del Cabildo.
A destacar, la presencia de la Banda, creo que era de Carrión de Calatrava, que abría el desfile, con una música preciosa, así como el movimiento o coreografía de sus integrantes.
Fue digna de ver, y mi felicitación tanto a dicha Banda como al que se le ocurrió contratarles. Son buenísimos.
Que razon lleva en su comentario……….»“A veces le damos más importancia por ejemplo a los concursos de limoná y otras cosas parecidas, y vemos cómo aparecen nuestros jóvenes manchados de vino hasta arriba, y muchos de ellos que se embriagan”, añadía. “ Tenemos que tener cuidado con todas estas cosas”…………Resumiendo el alcohol es el enemigo de la juventud, pero dios dice » ama a tu enemigo «………… que dilema
Parece que el Vicario se ha despachado a gusto. Don Bernardo ha puesto las cosas en su sitio respecto a esta fiesta contradictoria, absurda e hiperalcohólica donde la devoción a la Patrona es un mero pretexto, una coartada para la práctica desbocada del botellón y las micciones por las esquinas.
Casi cualquier fiesta, el pretexto religioso es solo eso, un pretexto. Lo importante realmente para la gran mayoría no es la devoción. Romerías, navidades, fiestas patronales, hasta Semana Santa. Que si, que se hacen en honor a, pero lo importante para la mayoría es salir de fiesta, las compras, etc. Es una batalla perdida. Además no ha ayudado que casi cualquier fiesta pagana que existiera años ha, se convirtiera en algo religioso.