El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado esta mañana que, una vez conseguida la mayoría absoluta en el número de escaños de las Cortes de Castilla-La Mancha, quiere gobernar de la mano de “la mayoría absoluta de la sociedad”. El jefe del Ejecutivo regional hacía estas declaraciones una vez que los miembros del nuevo equipo de Gobierno han jurado, o prometido, sus cargos en el marco de un acto institucional organizado en el patio central del Palacio de Fuensalida, en Toledo.
Las primeras palabras de García-Page han sido de reconocimiento y agradecimiento para el anterior equipo con el que trabajó en la X Legislatura a quienes ha agradecido su trabajo en unas condiciones muy adversas debido a la pandemia y la guerra en Ucrania. Asimismo, se ha mostrado convencido de “todas las piezas han encajado en el puzle que hemos compuesto. Con sus aportaciones y también con sus dificultades. Y estoy muy contento porque el trabajo del Gobierno ha sido enormemente provechoso para esta tierra. Ha dado lo que podía dar, y mucho más, por esta comunidad autónoma”.
Tras recordar que hoy se cumplen 13 años desde que la Selección Española se declarara campeona del Mundial de Fútbol 2010, ha señalado, que precisamente elecciones autonómicas del pasado mes de mayo, “han resultado ser un enorme aval a la gestión de estos últimos cuatro años. No se puede decir de otra manera, cuando hablamos de un porcentaje muy alto, de los más altos de España, el segundo más alto de la Comunidad Autónoma en condiciones verdaderamente hostiles, por no decir casi imposibles”.
El jefe del Ejecutivo regional ha manifestado que “siempre hay que aspirar a ganar las elecciones, y no a sumar como se pueda” y que “sumar a base de retales es restar”. Además, ha señalado que, si bien es cierto que se abre un tiempo nuevo, “en lo sustancial va a ser de continuidad, sin duda de ningún tipo, porque continúa el presidente”.
En alusión a los nuevos miembros del Consejo de Gobierno que hoy ha celebrado su primera reunión, ha dicho que “son personas todas de una enorme valía” y les ha pedido que no trabajen para ellos mismos, ni para el presidente, que deben hacerlo por y para la gente. “Acabáis de firmar un juramento, habéis comprometido un juramento de lealtad a la Constitución, al Estatuto y al Rey”, ha señalado.
Por el interés general
Para Emiliano García-Page ese compromiso debe llevar a los miembros del Consejo de Gobierno a estar “al margen del partido, de intereses espurios y con capacidad de raciocinio sobre los intereses particulares”. En este sentido, ha significado la necesidad de pensar en el interés general porque “la gente nos coloca aquí para gobernar, para tomar decisiones. Y evidentemente sabemos de esto, sabemos cuáles son las reglas del juego. Y encontrar la oportunidad para una decisión a veces es lo más difícil de la tarea de gobernar”.
“Un Gobierno no es la suma de individualidades, es un equipo”, ha dicho García-Page convencido de que la gente no entiende cuando hay contradicciones entre unos consejeros y otros. “No entienden cuando el presidente va en una dirección y algún miembro del Gobierno, o dos o tres o los que sean, van en otra”, ha argumentado, expresando su deseo de trabajar en equipo porque “cuando prometemos guardar las deliberaciones del Consejo de Gobierno se está diciendo algo más que lo que marca la Ley Electoral y la Ley general. Se está diciendo que lo que hacemos es una piña”.
Honestidad y esfuerzo
El mandatario castellanomanchego ha pedido al nuevo equipo que cumplan dos máximas “que aquí son ley: honestidad y esfuerzo” y ha puntualizado que “no se consigue nada si no es trabajando”. Así mismo, ha explicado que el mapa político ha cambiado y que cada día es más importante la capacidad de coordinación. Con ese afán, el de la coordinación, ha justificado la elección de contar con dos vicepresidencias para estos próximo cuatro años.
“Con este Gobierno me hago responsable de todo lo que pasa en la región. De lo que es competencia de la Comunidad Autónoma y también de lo que es competencia de otras administraciones, pero que nos preocupan, y eso exige un nivel inmenso de coordinación”, ha explicado, reconociendo que es necesario que en “la Presidencia tengamos muy claro qué hay que hacer en cada caso y con cada tema, dependa o no de esta comunidad autónoma”.
Las consejerías de Igualdad y Portavoz son también una prioridad para el presidente García-Page que ha depositado en la comunicación de la gestión del Gobierno un destacado altavoz y la igualdad “una prioridad absoluta”.
Del mismo modo, se ha referido a las consejerías de Desarrollo Sostenible y de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural que “tienen mucho que coordinar y colaborar con sostenibilidad, porque la mitad de nuestra comunidad autónoma tiene base forestal”, ha manifestado, convencido de que “además tienen que ser la base de un nuevo sector económico que está empezando a pujar y a generar mucho empleo, que es precisamente el de la industria de la sostenibilidad. De esa manera redondearemos el objetivo de fondo”.
Tras reconocer la importancia, y el peso específico de la riqueza del sector agroalimentario en la región, se ha referido en concreto a la Consejería de Economía, Empresas y Empleo al argumentar que “el crecimiento económico que es crecimiento empresarial no es un crecimiento ajeno, no se trata de que crezcan las atribuciones del Gobierno, se trata de que crezca la empresa, de que cada vez haya más, de que se pueda ganar más dinero y este Gobierno está para que esa riqueza que se genere, se comparta”, ha referido.
Sanidad, educación y prestaciones sociales
Los servicios de sanidad, educación y prestaciones sociales son un objetivo central del presidente de Castilla-La Mancha que ha garantizado están más que garantizados y “bien amarrados incluso a expensas de ese principio nebulosa que viene para el 2024 con la Unión Europea que ya avisan y avisan los alemanes de que puede haber ajustes”. También ha significado la importancia que juega la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Trasformación Digital en la buena gestión del Gobierno.
“Este es un Gobierno que paga más rápido que la mayoría, que en estos momentos está afrontando sus compromisos, que los tiene que hacer todavía más si se pone más estrecha la situación en materia de déficit o en materia de deuda, pero que no va a sacrificar a las personas, que no va a sacrificar su alma social por ningún tipo de inventiva europea”, ha garantizado García-Page, que también se ha referido a otras áreas como la de Fomento, de la que ha destacado la importancia que desempeña la planificación urbanística o la vivienda, que son “objetivos de máxima prioridad”.
El presidente de Castilla-La Mancha ha señalado por último que será duro con quien “sea sectario con esta comunidad” y ha puesto a disposición de toda la sociedad a los “hombres y mujeres que hoy han tomado posesión”.
El nuevo Gobierno
El nuevo Gobierno regional está conformado por José Luis Martínez Guijarro, quien ostenta de nuevo la Vicepresidencia Primera, mientras que la Vicepresidencia Segunda es para José Manuel Caballero y Patricia Franco y Juan Alfonso Ruiz Molina seguirán al frente de las consejerías de Economía, Empresas y Empleo y Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital.
De su lado, Sara Simón es la nueva consejera de Igualdad; Esther Padilla la nueva consejera Portavoz; Jesús Fernández Sanz sigue al frente de Sanidad; Julián Martínez es el nuevo consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural y Amador Pastor lidera Educación, Cultura y Deportes.
Asimismo, Nacho Hernando repite en la Consejería de Fomento, Bárbara García en la de Bienestar Social y María Mercedes Gómez es la nueva consejera de Desarrollo Sostenible.
Todos los consejeros han prometido sus cargos, excepto Nacho Hernando y Bárbara García que los han jurado. Todo ello previa lectura del decreto correspondiente a cada nombramiento al que ha dado lectura el secretario general de la Presidencia, Rafael Pérez Agua.
En la presentación, Page ha hablado de tener dos vicepresidencias con «dos pesos pesados», José Manuel Caballero y José Luis Martínez Guijarro, una suma de fuerzas «necesaria» por su coordinación ante un mapa electoral que «ha cambiado».
«Me gusta marcar un ritmo en el que estemos cerca de cualquier problema, zonal, local, provincial o regional. Ese es el objetivo, llegar más lejos de nuestras competencias», ha apuntado.
Ha hecho aquí alusión a todos los gobiernos locales, –siete de los ocho más importantes de la región–, que han cambiado del PSOE a manos de PP y en muchos casos con apoyo de Vox, para asegurar que no va a rehuir su responsabilidad en todo el territorio al margen de los alcaldes.
«Seré muy duro con un consejero que trate con sectarismo a un alcalde, pero de la misma forma lo seré si pasa lo contrario. A menuda se echa la culpa al más fuerte cuando a veces empieza a otros niveles», ha alertado.
Sobre Sara Simón y Esther Padrilla, consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno, respectivamente, tienen la «energía» equivalente a la energía «de un Red Bull de buena mañana» para afrontar dos retos importantes, apuntalar las políticas de igualdad y la comunicación del Ejecutivo.
En materia de Agricultura, le ha dicho a Julián Martínez, que ostentará una Consejería con «un ritmo de trabajo intenso y que ha de cumplir con los ritmos que le marca Europa». Aquí, ha citado al todavía ministro Alberto Garzón, quien puso en «el punto de mira» a la ganadería, razón por la cual le ha otorgado al sector más peso elevándola a categoría dentro de la cartera que gestionará el albaceteño.
Ha añadido en este punto la importancia del desarrollo rural, hilándolo con Desarrollo Sostenible, que estará a cargo de Mercedes Gómez, a quien ha pedido «redondear» objetivos como apostar por la masa forestal como sector.
A Patricia Franco, el referente de su gobierno en materia económica por tercer mandato consecutivo, le ha recordado que la riqueza que se genere se tiene que compartir con toda la población, «fundamentalmente en empleo», algo que será un «objetivo central».
Franco ha de conformar «un dúo», como hasta ahora, con Juan Alfonso Ruiz Molina al frente de la Hacienda, quien será el que tenga que «barrer la casa y barrer para adentro».
Al titular de Sanidad le ha reconocido el auge del modelo en los últimos años, si bien le ha avisado de que «todavía quedan años» para apuntalar; mientras que a Amador Pastor, ahora encargado de Educación, le ha mostrado el mismo camino.
En Bienestar Social, la Dependencia será punto clave de la legislatura, y ha de ser «seña de identidad» y no «elemento excepcional» en la comparación con el resto de España.
Por último, el desarrollo de carreteras y ensanchar el modelo de Vivienda son los dos encargos a Nacho Hernando, consejero de Fomento.
Reconocimiento al Gobienro saliente
Con este contexto, ha querido hacer un «reconocimiento» al gobierno saliente por haberle acompañado en el camino en el mandato que vino marcado por la pandemia.
En todo caso, ha sido una legislatura «enormemente provechosa» que han terminado con el «enorme aval» de la mayoría absoluta reeditada.
Ese gobierno fue capaz de aumentar el porcentaje de votos para el PSOE y conseguir revalidar mandato «pese a las tretas» de la ley electoral vigente, algo que ha celebrado.
«Siempre hay que ganar las elecciones, no sumar como se pueda, porque sumar a retales es restar», ha indicado, añadiendo que en la Comunidad Autónoma, frente al Gobierno sólo había «un intento de carambola».
En todo caso, si PP y Vox hubieran sumado fuerzas, él hubiera reconocido la legitimidad de ese hipotético gobierno de derechas en la región.
Pero, ha dicho, el trabajo electoral ha de ir encaminado a escenarios «consistentes», y este Gobierno que ahora presenta va a tener «mayoría absoluta y va a seguir teniendo mayoría más que absoluta entre los ciudadanos», porque «no se puede gobernar sin la gente».
Con todo, su gobierno saliente ha demostrado «capacidad de escucha y ambición por la región fuera de toda discusión».
«No creo que haya un sólo asunto estratégico para esta tierra que haya pillado mirando a otro lado al Gobierno que he presidido. Ya sea agua, recursos naturales… siempre, ante la duda, hemos apostado por lo que más interesaba», ha abundado.
Pero, en los últimos años, «han funcionado todas las piezas», y una sola que no lo hubiera hecho habría «descabalado» al equipo.
«Estoy contento, el trabajo del gobierno ha sido muy provechoso para esta tierra», ha defendido García-Page, quien ha apuntado que una vez pasadas las elecciones, conviene no sólo hacer balance, sino «valorar lo hecho y analizar cuáles son las piezas necesarias para que el engranaje siga sin fallar, y cual es el combustible para rellenar la maquinaria».
