Puertollano rendirá homenaje al escultor y maestro de la abstracción, Pepe Noja, que falleció ayer en Madrid, durante los actos de celebración el 4 de diciembre de la festividad de Santa Bárbara, patrona de los mineros, y ya esta misma noche lucirá con un color especial amarillo su Monumento al Minero, el más emblemático y más conocido, que se ha convertido en referencia para cualquier viajero que pasa ante el cerro de Santa Ana.
Un artista que siempre llevaremos en el recuerdo
El alcalde, Miguel Ángel Ruiz, ha reconocido que Noja es un referente y un artista que siempre llevaremos en el recuerdo y expresó su cariño a su familia de una ciudad que este año conmemoraba el 40 aniversario del Monumento al Minero, del que no cobró nada por su trabajo, tan solo los materiales, como ha recordado el alcalde, y de los 150 años del descubrimiento del carbón.
Autor de dos monumentos
Pepe Noja es autor del Monumento al Minero (1983) situado en el Cerro de Santa Ana y también del monumento a la minería (2000) ubicado en el puente de San Agustín.
“Sus monumentos son un emblema para nuestra ciudad, es el reconocimiento al esfuerzo a tanta gente que murió trabajando para crear la ciudad que hoy tenemos”, y por ello anunció que se preparará un acto especial para tener “en nuestra memoria y en la de todos los ciudadanos la figura de Pepe Noja”.
Eres un buen Alcade, gobiernas para todo el pueblo.
Tu eres mas simple de lo que pareces
Míauuuuuu y tu estas descompuesto, ahora vas y lo difundes!!
jejejejejejejejejejejejejejejejejejejeejejejeejje activate chaval, alegrate que con lo tonto que eres no tendras problema, ahora vas y la chupas
Pues para mi no ha hecho todavía nada, ósea que estas bien equivocado en lo que dices
….. SIN COMENTARİOS……
Se va a homenajear a aquel que ensalzó con su obra a las sombrías figuras de Azaña y Largo Caballero… Por un momento he pensado que seguía gobernando el socialcomunismo en Puertollano, pero no, no, es un gobierno del PP (o al menos presentado bajo esas siglas).
Menudo gol nos ha metido el masón de marca blanca.
Cada día una decepción nueva.