Ese es el compromiso del gobierno regional y del presidente Barreda: fomentar la investigación y la formación en relación con esta patología para mejorar la calidad de vida y paliar los efectos adversos de esta enfermedad que, en buena parte de los casos, se puede tratar manteniendo una vida plena.
Una tarea que hay que realizar no sólo con las personas diabéticas, sino también con su entorno social, educativo y familiar porque este aspecto, en el que contamos con la colaboración inestimable de las asociaciones y de las familias, resulta muy positivo para aprender a cuidarse y a vivir con la enfermedad, y prevenir complicaciones asociadas.
Por ello, en Castilla-La Mancha, el gobierno regional a través de FUCAMDI, y en colaboración con ese tejido asociativo, está desarrollando una serie de iniciativas educativas desde las edades más tempranas, como las colonias y campamentos de verano para niños diabéticos que se realizan cada año, donde los chavales combinan el aprendizaje de aspectos básicos sobre el control de su enfermedad y tratamiento con actividades de ocio y ejercicio físico.
Asimismo, desde la Consejería de Salud y Bienestar Social seguimos impulsando, a través del Plan Integral de la Diabetes en Castilla-La Mancha 2007-2010, y de la Estrategia para la nutrición, actividad física y prevención de la obesidad, una serie de actuaciones y medidas de educación, prevención y promoción de la salud, diagnóstico precoz y atención sanitaria con el objetivo de fomentar hábitos de vida saludables, una nutrición equilibrada y combatir el sedentarismo y la obesidad, que son las causas más comunes para la aparición de la diabetes tipo II.
El Gobierno de Castilla-La Mancha lleva a cabo también otras acciones para mejorar la calidad de vida de las personas diabéticas, como la atención podológica gratuita, primera comunidad autónoma que lo hace, o la distribución de las tiras reactivas y lancetas también sin coste alguno para las personas con diabetes.
Asimismo, hemos puesto en marcha en colaboración con la Facultad de Medicina de Albacete uno de los pocos laboratorios de genética que existen en el país para la detección de diabetes tipo MODY, que representa aproximadamente el 5% del total de los casos de diabetes y que para su detección requiere este estudio genético.
La formación de los profesionales sanitarios y la investigación en esta materia, son objetivos prioritarios también para contribuir a reducir los efectos de esta enfermedad crónica que padece alrededor de un 7% de la población mayor de 30 años sin saberlo, según las conclusiones recogidas en nuestro estudio sobre Prevalencia de Diabetes Mellitus en Castilla-La Mancha.
Identificar, diagnosticar y facilitar el tratamiento necesario a estas personas, por tanto, es otro gran reto para la administración sanitaria, para los profesionales y para el conjunto de la sociedad que se puede lograr a través de un mayor conocimiento de la enfermedad.
En este Día Mundial de la diabetes quiero transmitir mi agradecimiento a los profesionales, y mi apoyo sincero a la labor de las asociaciones de familiares y enfermos diabéticos por su trabajo y dedicación en la lucha contra esta enfermedad crónica, porque conocer la enfermedad, entenderla y saber convivir con ella permite mejorar la calidad la calidad de vida de quienes la padecen.
En esta tarea seguiremos trabajando siempre en coalición con la sociedad.