Julián Maldonado Fernández, Francisco Javier Mozos Mazoteras y Luis Martín Moyano.- Ayer el cielo abrió su puerta principal de par en par. Ayer fue un día muy triste. Ha fallecido nuestro amigo y de nuestras familias D. Fidel De Gregorio Funez. Nos conocimos en el Colegio Salesianos de Puertollano, posteriormente, fuimos compañeros en las Unidades 200/500 de Refinería 2 de Repsol y más tarde en el Equipo Permanente Contra Incendios de Repsol Petróleo.
Nuestra amistad siempre se mantuvo y se acrecentó aún más cuando hemos realizado viajes juntos, unas veces por el Inserso y otras fuera del mismo. Aún algunos viajes, se nos han quedado en el tintero. Siempre te recordaremos como un buen amigo, noble, gran profesional, gran esposo, padre y abuelo, amigo de sus amigos, una persona muy familiar y siempre con tu sentido del humor que algunos no lo conocían, al dar la apariencia de serio.
No te gustaban los chismorreos según nos cuenta tu hermana y hemos podido constatar pues cada vez que alguien los hacia decías “ tú estás seguro de esto o de aquello”. Dejas grandes recuerdos entre las personas que te queríamos. Siempre recordaremos tus famosos paseos que hacías a diario “ de la Graci a la Mari”, quien al principio lo desconocíamos nos llamaba la atención hasta que supimos que para tus paseos diarios, ibas de tu casa a la Virgen de Gracia y desde allí a la Virgen María Auxiliadora.
Sabemos que el día anterior a tu fallecimiento, le dijiste a tu familia que ayer estarías en el cielo y sin duda alguna allí estarás, pues la Virgen de Gracia y la Virgen María Auxiliadora seguro lo habrán hecho posible; solo esperamos que cuando nos encontremos tengas anotados los mejores sitios para tapear y sobre todo comer, algo que seguro te costará poco trabajo, dado que así nos tenias acostumbrados, pues en cada viaje a los que hemos ido era lo habitual.
Te deseamos que descanses, porque no es justo tanto sufrimiento como has pasado para este final, aunque si decimos que has sido muy fuerte y que a pesar de todo lo que has pasado, jamás has expresado ninguna queja, siempre has procurado no manifestarlo y el rato que pasásemos, hacerlo lo más grato posible. Finalmente recordamos tu frase “ que el dinero tenía que pasarle al final de año como a los ajos que se secase”, que aunque antigua frase, en tu caso particular era una acertada crítica a esta sociedad tan egoísta y que tan solo nos movemos en gran parte por criterios económicos “como si jamás nos fuésemos a morir”.
Fidel, siempre te recordaremos por la excepcional persona que has sido.
¡Hasta luego amigo!
Julián Maldonado Fernández y Francisco Javier Mozos Mazoteras.