El primer teniente de alcalde de Argamasilla de Calatrava, José Antonio García, ha referido este jueves que había «un fuerte olor a gasolina» en la casa de campo incendiada este miércoles, en la que vivían Alfonso L.G., el tirador asesino de Argamasilla de Calatrava abatido la semana pasada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tras matar a dos personas, y su padre, herido en el incidente.
El inmueble ha quedado arrasado por un incendio en la noche de este miércoles, en lo que no se descarta que sea un incendio provocado, según ha señalado el edil rabanero en declaraciones a CMM Radio. Así, preguntado si el fuego ha sido algo inesperado, el representante municipal ha dicho: «Bueno, inesperado, inesperado… Una vez que pasa, dices, pues esto tiene toda la pinta de que alguien haría algo, pero no es lo normal, evidentemente».
El fuego fue detectado sobre las 21.30 horas de este miércoles, y las labores de extinción, a cargo de bomberos del parque de Puertollano, se prolongaron hasta pasada la medianoche. Las mismas fuentes no han podido precisar aún las causas del suceso, aunque sí han confirmado que no se han registrado víctimas, toda vez que no había nadie en el inmueble. Al lugar de los hechos también se han desplazado efectivos policiales y de la Guardia Civil, que investiga lo sucedido.
En la mañana de este jueves, los bomberos han procedido a revisar la vivienda afectada, según ha informado Emergencia Ciudad Real.