Una exposición repartida en dos sedes, la iglesia parroquial propiamente dicha y el centro parroquial, muestra desde el pasado fin de semana al visitante el pequeño tesoro que posee la Parroquia de San Antonio de Padua de Puertollano, que está inmersa en la celebración del 50 Aniversario.
La exposición ofrece objetos y vestiduras religiosas, algunos de los cuales tienen un marcado carácter histórico y también sentimental, como el cáliz de plata con el que el primer párroco don Juan celebró su primera misa en 1952 o la casulla que lució el obispo de la Diócesis, don Juan Hervás. durante la misa inaugural de la iglesia y de la que únicamente se conserva el medallón. También hay cálices, custodias, misales en latín y castellano, relicarios, rosarios, paños de hombro, casullas y otros ornamentos litúrgicos, así como las imágenes que representan a San José y la Virgen, de finales del siglo XIX y donadas a la parroquia por don Juan.
Tradición, fe, cultura, devoción y arte se dan cita en esta exposición que estará abierta hasta el próximo sábado. Las horas de visita son de seis a ocho de la tarde tanto en la parroquia como en el centro parroquial. Esta iniciativa que abre las puertas de la Iglesia a los ciudadanos es una más de cuantas está llevando a cabo la Comisión del Cincuentenario presidida por el actual párroco, don Alfonso Morejudo.
Ha sido, pues, una cadena de actos tanto religiosos como culturales ya que no han faltado el canto ni los conciertos ni las conferencias, ni el teatro. La exposición es por ello un hito más en esta actividad de la Parroquia, ocupada a lo largo de este año 2022 en dar contenido a sus 50 años de existencia.