Una noche para elegidos ha sido la vívida este sábado en el coso polivalente de Puertollano. El primer concierto de las fiestas de la ciudad no ha contado con un seguimiento masivo de público, pero ha ofrecido, a precio de ganga, el talento de un artista ya consagrado como uno de los grandes músicos del país, Rubén Pozo, y la vertiginosa sinvergonzonería de los fabulosos ‘Antílopez’, una formación única en su concepto que cada día gana más adeptos.
Rubén Pozo, ex Pereza, ha desgranado, desde su honestidad, cercanía y humildad, un paquete de soberbias canciones que beben del rock clásico y se sostienen en deliciosos pilares acústicos, desde la evocación de los Rolling Stones hasta la escena indie, arropado por su enorme banda.
De su lado, los onubenses ‘Antílopez’ desplegaron una deslumbrante colección de sonidos anclados en su sempiterno sentido del humor, con letras brillantes y una continua sorpresa en su laberíntico cambio de estilos, desde el rock and blues hasta el rock progresivo andaluz, el flamenco, el pop, la rumba o el reggae. Impresionantes.
El fin de fiesta llegó con ‘Los G’, la banda puertollanera que, con la voz de Fran Hervás, tributa a Hombres G por medio país, y con la que el público redescubrió, entre frenéticos movimientos de caderas, las magníficas baladas del grupo madrileño.