La Asociación de Madres y Padres de Alumnos del colegio público Ramón y Cajal de Puertollano ha iniciado este martes una campaña de recogida de firmas en este centro escolar para solicitar a Educación que ayude en un centro o entorno especializado al alumno con necesidades especiales cuyo comportamiento ha ocasionado partes de lesiones de niños ante la Policía Nacional y que una profesora tutora se haya dado de baja por motivos psicológicos.
La tercera y última jornada de protesta de padres y alumnos, que tampoco han pasado a clase en el último día lectivo del curso, ha estado marcada por el malestar generado por el comunicado de Educación reproducido en los medios de comunicación, en el que la autoridad educativa desmiente las denuncias de los padres.
En este sentido José Manuel García Hervás, presidente de la AMPA, ha lamentado que la Delegación de Educación no se haya dirigido oficialmente al colectivo y haya emitido un comunicado con manifestaciones «dolorosas» en las que se acusa a los padres de «mentir». «No creo que estos padres y niños se manifiesten a las puertas del centro por gusto», ha lamentado, al tiempo que ha reiterado sus denuncias de «pasividad y dejadez» de la Delegación de Educación. «El alumno venía de otro centro, con lo cual la autoridad educativa ya era conocedora del caso, y solo comenzó a actuar en enero, cuando los padres convocaron las primeras movilizaciones», ha recordado. Hervás ha apuntado asimismo a una falta de atención de la Inspección de educación, agravada ahora con la publicación de una nota de prensa que no hace sino «ensuciar y manchar» las legítimas demandas de los padres.
En este contexto sí ha agradecido el apoyo de la comunidad educativa, profesorado y Ayuntamiento de Puertollano, institución con la que mantendrán una reunión el próximo día 27 de junio. Mientras tanto, se ha iniciado una campaña de firmas entre los padres del colegio para pedir a Educación que el menor con necesidades especiales pueda ser ayudado y atendido en un centro o entorno especializado.
En los mismos términos se ha expresado Javier Zarco, uno de los padres afectados, quien ha lamentado que «la administración, en vez de intentar solucionar el problema, conteste a través de la prensa». Además, ha reiterado que «ningún padre ha insinuado que se actúe fuera de la legalidad, sino precisamente que se haga cumplir la ley y se apliquen los decretos de la propia Consejería de Cultura, que establecen medidas concretas ante este tipo de casos, y no que se hagan experimentos con niños pequeños».
El clima de tensión se ha mantenido, con altibajos, desde el inicio de este curso, y la asociación de padres y madres llegó incluso a convocar movilizaciones en demanda de ayuda para solventar la situación generada en un aula, desconvocadas una vez se adoptaron las primeras medidas. Los últimos sucesos relacionados con el caso han reavivado el malestar en el colectivo.