El Ayuntamiento de Mestanza ha iniciado en una de las principales arterias de distribución de la red de agua potable, la renovación de esta vetusta infraestructura conforme a lo estipulado en las condiciones por las que se renovó la concesión con la firma EMASER.
El alcalde, Santiago Buendía, dice que los informes técnicos de la consultora de ingeniería ECINGEN, “constatan que las canalizaciones urbanas del agua potable tienen al menos ya un cuarto de siglo, algunas más años incluso y no había adaptación a normativa sanitaria”.
Por eso, con la actuación que ahora se ha ejecutado en la calle Cañada, la de mayor inversión al rondar los 24.000 euros, se ha empezado a sustituir las desfasadas tuberías de fibrocemento, tan propicias para averías, por conducciones de fundición dúctil.
“En el Ayuntamiento somos conscientes de que estas obras, imprescindibles también para establecer una sectorización del mallado urbano para impedir que una pequeña rotura deje al resto del pueblo sin suministro, causan molestias, pero había que acometerlas”.
En el caso de esta calle se ha buscado provocar el menor número de trastornos, por eso se ha ejecutado en muy poco tiempo y en una época de menor movilidad ciudadana como es enero, repercutiendo por otro lado en la mejor calidad de suministro a sus hogares.
Buendía agradece la paciencia de quienes residen y tienen cochera en la calle objeto de esta primera gran actuación y apela a su comprensión, “porque de no actuar ya, nos abocaríamos a problemas mucho más serios de fugas y cortes del abastecimiento”.
No en vano, el regidor apunta que durante los 20 años de la anterior concesión, la firma adjudicataria no hizo ninguna labor de mejora de la red, más allá de abordar incidencias, “y por eso nuestras condiciones en la negociación eran acometer, sí o sí, estas mejoras”.
El proyecto global recoge acciones análogas en calles Iglesia, Llaguno e Hinojosas, que con las ya realizadas esta legislatura en la zona del depósito general, en mallados de final de red y en la renovación de valvulería, suponen 130.482,24 euros de ejecución por contrata.
A la hora de costear estas inversiones, el Ayuntamiento mestanceño está recurriendo, junto a sus propios fondos, a diferentes convocatorias de planes provinciales, ajustándose el de la calle Cañada al Plan de Obras de la Diputación en su anualidad 2021.
Para las restantes, el Consistorio que dirige Buendía estaba pendiente de la convocatoria del nuevo Plan de Obras provincial para los años 2022 y 2023, ya en vigor y que reserva para el municipio más de 120.000 euros.
Desde el 1 de enero de 2018 el nuevo convenio de concesión con EMASER está vigente en todo el término municipal, en la localidad titular, así como en la pedanía de Solanilla del Tamaral y la EATIM de El Hoyo, contemplándose también mejores en ellas.
Para Santiago Buendía, “es una satisfacción que en la oportunidad que teníamos de negociar condiciones para renovar esta concesión, nuestra exigencia de mejorar estas redes tan imprescindibles se haya podido al fin atender y estemos ya en marcha con tan importante proyecto de legislatura”.