El Gobierno de Castilla-La Mancha y los agentes sociales han firmado el acuerdo de los planes de trabajo para 2021 en el marco del Consejo de Diálogo Social.
En la reunión de la Comisión Permanente del Consejo, con los miembros de los sindicatos y la organización empresarial más representativos de la Comunidad Autónoma, han participado por parte del Ejecutivo regional, la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco; la viceconsejera de Diálogo Social y Bienestar Laboral, Nuria Chust; el secretario general de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo, Rafael Ariza; y la secretaria del Consejo, Carmen Gamarra.
Los planes de trabajo, aprobados hoy por la Comisión Permanente del Consejo, recogen las actividades subvencionables por cada línea de actuación. En total se concede un importe de 2.464.500 euros.
El decreto de la creación del Consejo de Diálogo Social proviene de la Ley de Participación de Castilla-La Mancha, que se aprobó en diciembre del año 2019 y comenzó su actividad el pasado 25 de junio con la firma de constitución que tuvo lugar en Almadén con la presencia del presidente regional, Emiliano García-Page; la consejera Patricia Franco; el secretario de Organización, Comunicación y Formación de UGT Castilla-La Mancha, Luis Manuel Monforte; el secretario regional de CCOO, Paco de la Rosa; y el presidente de Cecam, Ángel Nicolás.
Entre las principales funciones del Consejo se encuentran las de conocer de manera anticipada los anteproyectos de ley y el desarrollo de las normas legales en la región, así como recibir información sobre los planes, programas o actuaciones que ejecuta el Gobierno regional.
También dentro de sus funciones está el proponer y participar en la elaboración de informes, estudios, criterios y líneas generales de actuación; proponer iniciativas legislativas al Consejo de Gobierno o aprobar, evaluar y difundir sus acuerdos, entre otras.
En un pueblo de cuyo nombre no quiero acordarme 😉 el diálogo social consiste en asignar una partida económica para la «inclusión social» de lo más tirao que te puedas encontrar en el pueblo. Les dan un cursillo que consiste en hablar con una especie de tutor y pasar la mañana jijijajeando de botellón, porque en algo se tendrán que entretener. Todo ello con un sueldazo que vergüenza me da decirlo aquí.
Como todos los pueblos hagan esto nos vamos a la quiebra.