La consejera de Bienestar Social del Gobierno de Castilla-La Mancha, Bárbara García, ha admitido cierta preocupación ante el aumento de casos de coronavirus positivos en residencias de mayores en la Comunidad Autónoma, preocupación que en todo caso no implica «alarmarse en exceso» pero sí implementar «medidas preventivas» para evitar que el virus vuelva a abrirse paso en estos recursos residenciales.
A preguntas de los medios sobre un brote en un centro tutelado de la localidad toledana de Buenasbodas que se ha saldado con cuatro fallecidos, ha confirmado este extremo, si bien ha precisado que no se tiene la certeza de que haya sido el coronavirus sea el causante de las muertes.
En todo caso, ha reparado en que ya son 25 centros residenciales en la región con algún caso de los 258 positivos totales de los residentes, «mucho de ellos asintomáticos y en buen estado, pero que hay que controlar».
Aunque reconoce este «aumento», ha querido transmitir «tranquilidad, porque se está controlando y tomando medidas preventivas con un control exhaustivo en las cinco provincias».
Prevención y mucha cautela, el virus ha venido para quedarse.
La nueva resolución del Gobierno regional actualiza las normas de funcionamiento de las residencias de mayores en lo que hace referencia a la infección por ‘SARS-CoV-2’, con el objetivo de evitar casos de enfermedad, hospitalizaciones y muertes entre las personas residentes y trabajadoras…..