El presidente de Fundación Fuente Agria de Puertollano, Tomás Ballesteros, ha visitado el Centro y saluda a usuarios y profesionales, con los que ha compartido información e ideas sobre la organización del centro y sus actividades
Esta pandemia ha castigado especialmente a las personas con discapacidad intelectual atendidas en el Centro de Día de mayores de 50 años de la Fundación Fuente Agria, quienes ante las medidas de prevención establecidas por la Consejería de Sanidad no podían recibir atención en los centros anexos a residencias.
A pesar de ello, gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Puertollano, durante todo este tiempo los usuarios han recibido atención y actividad en varios espacios del Centro de Juventud, gracias a la colaboración de sus trabajadores. Y tras esta larga espera, y finalizada la restricción, con la llegada del mes de julio se ha reiniciado la actividad en este centro en las instalaciones anexas a la Residencia de Mayores Pocitas del Prior.
Para ver de primera mano el trabajo que se lleva a cabo, el presidente de la Fundación Fuente Agria y concejal de relaciones con colectivos, Tomás Ballesteros Escudero y el gerente, Antonio Asencio Rojas, han visitado las instalaciones, saludando a profesionales y usuarios, e interesándose por la organización del centro y sus actividades.
Tras la visita, los responsables de la Fundación han manifestado su satisfacción por la vuelta de las actividades, «es un placer volver a estar en nuestro Centro y poder disfrutar de nuestros espacios y recursos. La normalidad cada vez está más cerca».
Centro de Día Mayores de 50 años
El Centro de Día para personas mayores de 50 años es un servicio diurno, abierto y polivalente, un recurso social destinado a favorecer la permanencia de usuarios del Centro Ocupacional en su entorno. Para tal fin se contempla la necesidad de que cada usuario disponga de un Programa de Apoyo Individualizado adaptado a sus características individuales.
El programa presenta una orientación educativa mediante la realización de actividades formativas, de adquisición de habilidades sociales, de rehabilitación terapéutica y física y de ocio y tiempo libre. En definitiva, es un programa que tiene por objeto facilitar el desarrollo de los usuarios, mediante la realización de actividades, facilitando una mejor calidad de vida, en un entorno respetuoso con sus necesidades y con el apoyo y supervisión adecuados.
El Centro de Día Mayores de 50 años cuenta con 20 plazas para usuarios cuyo grado de discapacidad intelectual no les ha permitido integrarse temporal o definitivamente en una empresa ordinaria o en un centro especial de empleo, y que han alcanzado una edad en la que no es previsible que lleguen a tener un contrato de trabajo.
Pues poco van a durar los pobres, con el nuevo decreto que prepara la junta, quitaran toda la asistencia que tienen, sin terapia, si fisios, sin medicos y sin trabajador social, solo llevarlos a que miren la pared y se mueran del asco como hace 40 años.
Para ahorrarse pensiones. Todo esto de la pandemia va de eso. Todos lo pensamos o lo hemos pensado.