La Junta de Personal de Ciudad Real ha vuelto a poner de manifiesto la situación “límite” que atraviesa el Juzgado de Violencia sobre la Mujer cuya plantilla es claramente insuficiente para asumir asuntos tan “inmediatos” de violencia de género y compatibilizarlos con los ordinarios. En un comunicado, este órgano reclama «por enésima vez» que se convierta en un Juzgado exclusivo que dé cumplimiento a lo dispuesto en la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género.
A su juicio, las nuevas competencias que surgieron en 2005 a consecuencia de la entrada en vigor de dicha ley han supuesto para los trabajadores del Juzgado de Violencia de Ciudad Real un incremento de funciones que no puede ser asumido por la plantilla actual, que consta solamente de dos gestores y dos tramitadores. «Es claramente insuficiente porque los funcionarios, al no estar liberados de otros asuntos, deben compatibilizar la entrada de asuntos de un Juzgado ‘normal’ de Primera Instancia e Instrucción con las específicas de Violencia sobre la Mujer”.
“Esto se traduce», prosigue, «en que, durante la jornada ordinaria se funcione como un servicio de guardia permanente, cubierto de forma gratuita, lo que paraliza el resto de los asuntos”, explica el Presidente de la Junta de Personal, Ricardo Rosales. Asimismo, las funcionarias allí destinadas han trasladado su malestar «porque debido al nivel de presión exacerbado con el que deben trabajar y a los extenuantes horarios que afrontan temen que afecte negativamente a la tramitación de los procedimientos, además de perjudicar su salud ya que sufren, incluso, episodios de ansiedad».
Por otro lado, denuncian que les resulta imposible conciliar la vida familiar y laboral ya que por la propia inmediatez y urgencia de los asuntos que deben atender nunca saben a qué hora termina su jornada de trabajo. «De ahí que estos destinos no resulten atractivos y, por tanto, haya tanto cambio de personal».
La inestabilidad de la plantilla se une a las carencias formativas específicas en la materia de “igualdad y no discriminación por razón de sexo y sobre violencia de género”, que preveía la nueva Ley y a la falta de una retribución acorde a las nuevas circunstancias.
Por ello, la Junta de Personal de Ciudad Real reclama la «imperiosa necesidad» de crear juzgados especializados y exclusivos de esta materia, con el consecuente aumento de plantilla ya no sólo en la capital sino en todos los partidos judiciales de la provincia, así como el establecimiento de un plan de formación continua, con complementos retributivos que incentiven la penosidad del puesto, con el fin de buscar soluciones efectivas a los problemas que viven los trabajadores de dichas oficinas judiciales.