El Espacio Cultural «Sindical Espacio 13» de la calle Prim, 26 de Daimiel acoge este fin de semana dos nuevos espectáculos:
ADULTO – Sábado 1 de mayo a las 20.00
– Marta Marco. – Aves migratorias
Narración oral para adultos
Sesión de cuentos para público joven y adulto que se adentra
en la no-ficción para contar historias increíbles. Posamos la mirada en
mujeres que han tenido que dejar su casa para huir de la guerra, del matrimonio
forzoso, de violaciones o de la imposibilidad de realizarse por su condición,
viéndose obligadas a emigrar para empezar a escribir su propia historia.
Sus historias son duras, pero también tienen grandes dosis de valentía. En
cada una de las historias que se relatan, hay espacio para la ternura, la
alegría, la música, la emoción, la fuerza, la rebeldía. En cada una de
ellas se aprecia fuertemente la sororidad que caracteriza a las mujeres y lo
que facilita la labor contar con la ayuda de un compañero tierno.
No queremos que sus historias caigan en el olvido. Por ello, las vamos a
contar.
INFANTIL / FAMILIAR – Domingo 2 de mayo a las 12.30
– Marta Marco – Cuentos del Buen Querer – Familiar
Sesión de cuentos, canciones y poesía sobre Igualdad de género.
Somos
muchas las personas que deseamos un mundo más equilibrado, más respetuoso y
más justo con las mujeres. Tantas personas, que incluso existe un Pacto de
Estado contra la Violencia de Género que trata de reflexionar sobre esta
lacra, resolver esta injusticia histórica y reorganizar la sociedad de manera
justa.
Enfocamos esta sesión desde un punto de vista positivo, contando historias
sobre personas que saben quererse, que se respetan, que se ven como iguales,
aportando referentes gracias a cuentos divertidos donde una muchacha es
valiente, un príncipe sabe ser tierno, las brujas son guapas, los ogros se
enamoran y donde unos abuelos han aprendido a quererse de la manera que todos
anhelamos para nuestras propias historias reales.
Contaremos y cantaremos historias en las que los personajes se atreven a
cambiar roles y veremos lo increíblemente fácil que sería romper los techos
de cristal, si realmente se quisiera. El tema parece que da susto, pero nada
más lejos de la realidad, ¡lo vamos a pasar en grande!