Cuando está a punto de cumplirse un año de su fallecimiento, la Agrupación Municipal de Voluntariado de Protección Civil Ciudad Real ha rendido esta mañana un íntimo homenaje al que fuera su Jefe, José Luis Espadero. En su memoria se ha descubierto una placa en el patio de la agrupación, y se ha guardado un respetuoso minuto de silencio, roto en aplausos de admiración hacia quien llamaban “padre”.
José Luis Espadero falleció el 25 de abril de 2020 a consecuencia de un paro cardíaco durante los días más duros de la primera ola de la pandemia, en los que trabajó intensamente en su trabajo habitual como celador del Hospital General de Ciudad Real y en los servicios que la Agrupación Municipal prestó a la ciudad durante el confinamiento.
En el acto la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, ha anunciado que cuando se puede celebrar el Día de la Protección Civil que él puso en marcha, se entregará un premio que llevará su nombre. “Instauraremos el Premio ‘José Luis Espadero’ para que haya una acción social, lo que determine la agrupación de Protección Civil en consonancia con la familia, para que todos los años podamos recordar y premiar a alguien que siga la senda de un gran hombre que fue y que será José Luis Espadero”.
Zamora reconocía que “mucha culpa de que la agrupación municipal de Protección Civil haga la cosas bien, la tiene José Luis Espadero. Era un hombre serio, que te hacía sonreír, y reír con alguna broma que incluso no te esperabas de él. Tenemos que seguir trabajando porque sois esenciales para la vida de la ciudad, que habéis hecho una labor en la pandemia increíble”.
En nombre la familia, su hijo Miguel, agradecía este homenaje “por ensalzar los esfuerzos que ha realizado mi padre por esta ciudad y por esta sociedad”, y especialmente a todos los voluntarios “porque mi padre no hubiera sido nada sin vuestro esfuerzo y vuestra ayuda”. Además, pedía a todos “recordarle con alegría, que no nos invada la pena, no le lloremos, seamos felices. Alegrémonos. Mi padre era así, hagamos eso. Hagamos honor a él y sonriamos.”
El jefe de la agrupación, Alfonso Blanco, leía una carta escrita para Espadero, en la que reconocía que “dejas un hueco en nuestras vidas que será difícil de reponer. Recordaremos los buenos momentos que nos distes. Ahora estamos aquí siguiendo el trabajo de la agrupación por el mismo camino que nos enseñaste. Compartimos muchas cosas juntos, cuántas emergencias y servicios habremos compartido… esas prácticas de fines de semana que compartíamos hasta el último minuto del día y de la noche. Qué recuerdos tan imborrables. Gracias por pasar por nuestras vidas. Nunca te olvidaremos.”
Hoy los voluntarios y las voluntarias han querido recordarle a través de un video que han elaborado con su actuación al frente de la agrupación, y también han querido dejar una huella de su labor, por lo que con objetos, recuerdos y mensajes escritos han confeccionado una cápsula del tiempo, que ha sido cerrada y enterrada.
El concejal de Seguridad Ciudadana, David Serrano, reconocía que hoy los importantes “son aquellos que desde la vocación voluntaria crecisteis e incluso sois lo que sois gracias a él. Espadero os enseñó a todos los que tenéis el orgullo de vestir de naranja, y de velar por la seguridad de la ciudad. Cualquiera que haya convivido con “padre”, sabe que, aunque siendo posible discutir con él, siempre acabábamos aprendiendo algo. Si de algo tenemos un firme convencimiento es que debemos trabajar con su ejemplo por su legado”.