García-Page defiende un reparto ordenado de las vacunas y que exista “unidad de mensaje y de criterio en todos los rincones de España”

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha defendido hoy un reparto “ordenado” de las vacunas para la Covid-19 y que exista “en todos los rincones de España unidad de mensaje y de criterio”. Asimismo, ha insistido en la necesidad de que las vacunas “no se pueden convertir en el mismo zoco que fue al inicio de la pandemia el reparto de material”, ante los movimientos en solitario que algunas comunidades autónomas han iniciado para su compra.

Así lo ha señalado García-Page tras la presentación, junto a su homólogo canario, Ángel Víctor Torres, del convenio de cooperación entre Castilla-La Mancha y Canarias para el desarrollo del proyecto Historia Clínica Electrónica Estándar, Interoperable y Multirregional, un acto celebrado este viernes en Santa Cruz de Tenerife, y en el que también han participado los consejeros de Sanidad de Castilla-La Mancha y Canarias, Jesús Fernández Sanz y Blas Trujillo, respectivamente.

En este sentido, ha recordado que España “ha decidido lógicamente que el criterio técnico que impere sea el de la UE, y hasta que no esté hecha la auditoría a la empresa rusa, nadie puede comprarlo por razones de seguridad”.

Por ello, ha invitado a que todas las comunidades autónomas “hagan un esfuerzo de lealtad con el Gobierno de España en el mejor sentido de la palabra” y ha augurado que, si la única autonomía que estuvieran “sacando los pies del tiesto” fuera la independentista de Cataluña, “todos estaríamos poniendo el grito en el cielo”.

Así, ha pedido que exista “un único mensaje, y una única dirección, aunque seamos 17 gestores compitiendo por ver quién lo hace mejor”, al tiempo que ha recordado que estamos ante “un esfuerzo masivo de vacunación hoy, pero habrá que vacunarse cada año o cada dos hasta que haya tratamiento” y, por tanto, “es un problema de medio y largo plazo, y hay que ser coherentes”.

Estado de alarma

En otro orden de cosas, y preguntado por la fecha en que finalizaría el Estado de Alarma, García-Page ha señalado que “a nadie le gusta tomar medidas restrictivas y Sánchez lo que dijo es que el Gobierno y el país en su conjunto trabajan para que el día 9 no sea necesario tener Estado de Alarma”, pero se ha mostrado convencido de que si la alarma sigue existiendo para esa fecha “el Estado arbitrará mecanismos porque no nos podemos quedar en un limbo”.

Por el contrario, ha dudado sobre el comportamiento “ambivalente” de algunos partidos, que tienen opiniones contrapuestas en unas regiones y en otras. Así, ha exigido “coherencia”, porque a su juicio “es mejor apoyar una estrategia entre todos, aunque sea equivocada, que no tener estrategia. Este galimatías no ayuda a nadie”, ha lamentado.

Colaboración ante la inmigración

Por otro lado, y a preguntas de los medios relacionadas con la problemática de la inmigración que sufre Canarias, y la colaboración que pueden prestar otras comunidades, el presidente regional ha garantizado que “a mí me va a encontrar siempre todo el mundo para cooperar, independiente de quién sea el Gobierno. Nosotros no vamos a entrar en distingos porque es un problema de humanidad y de eficacia”, ha considerado, antes de poner el acento en la necesidad de “llegar a consensos a nivel europeo”.

En este sentido, ha querido felicitar al presidente Torres por su gestión “porque con mucha claridad antepone intereses de Canarias a los de su partido y esa es la única vía, defender una posición y llamar la atención” y ha insistido en que Castilla-La Mancha se va a prestar a colaborar, pero sabiendo que la responsabilidad y la financiación “tiene que ser del Estado”. Al mismo tiempo, ha criticado que haya fuerzas políticas “que le deben la mitad de sus expectativas a enmarañar y generar odio social”, una actitud que ha calificado de “muy grave”.

Un convenio que corrige un “defecto del Estado autonómico”

El convenio firmado hoy entre ambos mandatarios en materia sanitaria sobre el proyecto de Historia Clínica Electrónica consiste en el diseño de una nueva historia clínica electrónica interoperable y unificada para aquellos centros del Sistema Nacional de Salud que se adhieran al uso de los estándares marcados por la norma UNE ISO 13606. En ese sentido, García-Page ha destacado que “con este convenio, se viene a corregir un defecto del Estado Autonómico, dando un ejemplo de armonización real y útil, que abre un camino al que se invita a seguir al resto de comunidades”.

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