Ecovidrio ha publicado los datos de recogida selectiva de residuos de envases de vidrio en Castilla -La Mancha correspondientes a 2020, donde se recogieron a través del contenedor verde un total de 28.035 toneladas de residuos de envases de vidrio, lo que sitúa la aportación de cada ciudadano en 13,7 Kg/habitante (cerca de 47 envases por persona), en un año marcado por la Covid-19.
Durante 2020, los ciudadanos han depositado más de 263.000 de envases al día en los contenedores de vidrio, una media de más de 180 cada minuto.
Por provincias, Ciudad Real y Albacete son las que más han reciclado con 13,3 Kg y 12,8 kg/habitante, respectivamente, seguidas de Guadalajara (12,6 kg/hab), Cuenca (12 kg/hab) y Toledo (8,4 kg/hab), ha informado Ecovidrio en nota de prensa.
En 2020 los ciudadanos acudieron puntualmente a los 9.790 contenedores verdes que hay repartidos por toda Castilla la Mancha. Además de todo el vidrio depositado en los iglús por los manchegos, Ecovidrio ha podido recuperar 1.481 toneladas de vidrio a través de las tres plantas de tratamiento de residuos urbanos manchegos, reintroduciéndolas en el ciclo productivo para fabricar nuevos envases.
Los ciudadanos han consumido más envases de vidrio en sus hogares y han bajado al contenedor verde con más frecuencia, lo que confirma que el reciclaje de envases vidrio es un hábito consolidado, a pesar de la pandemia.
Como es lógico, en términos absolutos, 2020 registró un descenso en las toneladas recogidas a través del contenedor verde de un 2,9% en Castilla-La Mancha, un dato significativamente inferior a la caída media nacional (-6%), debido a los cierres y restricciones del turismo en general y de la hostelería en particular.
Este último sector es responsable de la generación de más del 50% de los envases de vidrio del mercado por lo que, en líneas generales, se han reducido los residuos de envases de vidrio puestos en circulación. Pese a ello, la leve caída de la recogida selectiva en Castilla-la Mancha se sitúa también muy por debajo del descenso del consumo estimado de los envases de vidrio (en torno al -11%, en línea con la caída del PIB), lo que pone de manifiesto el compromiso medioambiental de los hogares de la región.
Para José Manuel, Núñez-Lagos, director general de Ecovidrio: «El año 2020 ha sido un ejercicio especialmente positivo en lo relativo al compromiso con el medioambiente. En medio de la crisis sanitaria, los manchegos han seguido depositando el vidrio en el contenedor verde incluso con mayor frecuencia que en ejercicios anteriores, lo que demuestra que se trata de un hábito muy consolidado entre la población. En Ecovidrio estamos muy orgullosos y agradecidos al ver cómo ciudadanos, hosteleros, cadena de valor y administraciones remamos en la misma dirección y en clave de recuperación económica verde. Abordar la emergencia climática y la transición hacia una economía circular real para la protección de nuestros ecosistemas y biodiversidad es ahora mismo una prioridad».
En concreto, durante el pasado año, gracias al reciclaje de vidrio en la región se ha logrado evitar la emisión de 17.119 toneladas de CO2 equivalente a plantar 23.134 árboles y preservarlos durante 100 años
Evitar la extracción de 35.419 toneladas de materias primas (arena, sosa y caliza), que pesarían más de 3 veces el peso de la torre Eiffel. Ahorrar 21.080 MWh de energía, equivalente a más de un mes de consumo energético de todos los hospitales de Castilla- La Mancha.