El director general de Salud Pública, Juan Camacho, ha afirmado que desde que se inició el periodo de vacunación contra la COVID-19, no se ha parado la vacunación en ningún momento. “Todas las semanas se ha seguido vacunando en primeras dosis y todas las semanas se han asegurado las segundas dosis de las personas vacunadas». Así lo ha afirmado en una Comisión telemática de las Cortes de Castilla-La Mancha sobre la tercera ola de la pandemia.
Hasta la fecha, se han recibido en nuestra región un total de 101.655 dosis de vacuna, de las marcas Pfizer y Moderna, de las cuales se han administrado a fecha de hoy 98.940, alcanzándose la cifra de 28.597 personas a las que se administrado la pauta completa de Pfizer.
Camacho ha recordado que, debido a causas ajenas, y conocidas, sobre la inicial estimación de disponibilidad, se reciben a lo largo de tres semanas un total de 2.535 viales menos de la vacuna.
“Este hecho, conocido con la planificación ya hecha y la operativa en marcha, nos ha obligado a realizar ajustes en las acciones previstas. No obstante, y pese a ello, se alcanza según las estadísticas facilitadas por el Ministerio de Sanidad, un porcentaje de 87,6 por ciento dosis administradas sobre las recibidas, siendo la segunda Comunidad con una cifra más elevada en ese apartado”.
En las próximas semanas, y de acuerdo a la llegada de vacunas, se procederá a la vacunación de los grupos 3 y 4 de la primera etapa, de acuerdo a la estrategia y al calendario previamente establecido, con el compromiso de iniciar lo antes que sea posible la vacunación del grupo 5, el formado por las personas mayores de 80 años.
Capacidad asistencial
Por su parte, el director general de Asistencia Sanitaria, José Antonio Ballesteros, ha señalado que el Gobierno de Castilla-La Mancha “ha trabajado duro” en el tiempo transcurrido entre la primera y segunda y tercera ola de la pandemia para reforzar los Planes de Contingencia de cada una de las gerencias, lo que ha permitido que actualmente, y al contrario de lo que ocurrió al inicio de la crisis sanitaria, “podamos estar dedicando mucho de nuestro tiempo a la patología no Covid”.
Refiriéndose al caso concreto de la actividad quirúrgica, ha indicado que antes del inicio de la pandemia el servicio regional de salud había conseguido una “velocidad de crucero” de 500 intervenciones quirúrgicas de forma programada diariamente, además de todas las urgentes. Durante la primera envestida del virus, ha dicho, hubo que suspender gran parte de esas operaciones, a excepción de las urgentes y las no demorables, donde se incluyen las relacionadas con patología neoplásica.
La “tregua” que se produjo tras la primera oleada permitió recuperar la actividad y situarla entre el 75 y el 80 por ciento en los meses de verano y otoño, llegándose a operar en torno a 360 pacientes, “es decir, al mismo ritmo que se venía operando durante los años 203 y 2014 sin el hándicap de la pandemia”.
Esa situación, ha explicado Ballesteros, se ha podido mantener hasta hace dos semanas aproximadamente cuando, paralelamente al empeoramiento de la situación epidemiológica, los hospitales han tenido que ir escalando niveles en sus Planes de Contingencia, lo que implica ir ocupando zonas que habitualmente son utilizadas por las áreas quirúrgicas, como las de recuperación postanestésica.
“Hoy en día no tenemos pacientes intubados en nuestros quirófanos. Nuestros planes de contingencia han permitido que podamos dotarnos de 462 camas de críticos, tres veces más de las que teníamos al inicio de la pandemia”, ha asegurado Ballesteros, quien ha explicado que en ningún momento durante los últimos cinco años y medio, el sistema sanitario público regional llegó a necesitar más de 167 camas de UCI para atender a sus pacientes.
El director general de Asistencia Sanitaria ha manifestado que, en la situación actual de pandemia, para el sistema sanitario público regional hubiera sido “relativamente sencillo”, dado el nivel de aparataje y recursos humanos con los que cuentan los centros, dedicar todos sus esfuerzos a patología Covid “y lo haríamos de una forma razonablemente holgada”.
Pero el Gobierno de Castilla-La Mancha, ha dicho, “ha decidido dedicar una cantidad importantísima de recursos diarios no solo quirúrgicos, sino también diagnósticos y terapéuticos, a las patologías no relacionadas con la Covid”. A este respecto ha recordado que de las 13 resonancias magnéticas que hay en la región, nueve están funcionando en turnos de mañana, tarde y noche para el diagnóstico de enfermedades no relacionadas con la pandemia.
Por otra parte, ha recordado que los Planes de Contingencia han permitido incrementar la capacidad de hospitalización convencional hasta las 5.257 camas, muy por encima de la ocupación que se llegó a alcanzar al cierre del año pasado.
Teledermatología
El director general de Asistencia Sanitaria ha reconocido que si algo positivo se puede sacar de esta pandemia es, por ejemplo, acelerar el proceso de extensión a toda la Comunidad Autónoma de la Teledermatología.
Un programa que permite que, desde cualquiera de los 1.181 consultorios locales de la Comunidad Autónoma, un médico de Atención Primaria pueda realizar una captura de imagen de la lesión que presenta el paciente, enviársela al dermatólogo y en tres días y medio tener el resultado. “Si la patología es maligna, el paciente ya se queda a cargo del dermatólogo y están siendo intervenidos en menos de diez días”, ha asegurado.
Ballesteros ha lanzado un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía insistiendo en que el servicio público de salud “trabaja para muchas otras cosas”, poniendo como ejemplo la ingente actividad que se viene realizando en áreas con las de radiodiagnóstico, con resonancias magnéticas y TC funcionamiento a pleno rendimiento, o habiendo contabilizado durante el año pasado más de 95.300 tratamientos en los hospitales de día oncohematológicos.
Asimismo, ha recordado que se ha dotado a todas las gerencias de dispositivos en la fase diagnóstica, para la realización de PCR, TMA y test de antígenos.
A este respecto, ha señalado que, por ejemplo, los profesionales de Atención Primaria habían realizado hasta el pasado 3 de febrero un total de 89.705 test de antígenos, casi el 25 por ciento de los que se han llevado a cabo en el sistema sanitario regional.
Por último, se ha referido al refuerzo tanto en materia de recursos humanos, con la contratación de más de 9.200 profesionales desde el pasado mes de marzo, como de la capacidad tecnológica de los hospitales, con la adquisición de seis nuevos TC, siete salas de radiología digital y 21 equipos portátiles, con una inversión superior a los cuatro millones de euros.