Un gran castillo lleno de aventuras que descubrir será el epicentro del nuevo parque infantil del Paseo de San Gregorio de Puertollano, cuyas obras entran en la recta final a la espera que las condiciones climatológicas sean la más adecuadas para la instalación de la pavimentación, previsiblemente la próxima semana, según ha informado el consistorio en una nota.
Un parque accesible e inclusivo destinado a niños de hasta doce años, que podrá ser utilizado por niños con discapacidad ya que ninguna barrera impedirá su tránsito por el interior de este recinto delimitado con vallado perimetral para garantizar su seguridad.
Unas obras que supondrán un coste de 110.000 euros, financiadas con el Plan de Obras Municipales de la Diputación Provincial, de las que la Junta de Gobierno Local ha aprobado la primera certificación a favor de la empresa Galitec Desarrollos Tecnológicos SL, por un importe de 42.172 euros.
Dos zonas diferenciadas
La zona de tres a doce años dispone de un castillo central con una capacidad máxima de una veintena de usuarios, dos columpios para cuatro niños y un balancín de pingüinos junto al kiosco.
La zona infantil cuenta con cuatro elementos, uno accesible de columpios, una tortuga y una vaquita-tobogán, como guiño a la fiesta del Santo Voto, con distintos elementos de juegos y un castillo con toboganes y juegos.
Tan solo queda pendiente para la finalización del parque la instalación del nuevo solado de caucho, a la espera de la estabilización de la situación climatológica, ya que como ha explicado la portavoz del equipo de gobierno, Ana Carmona, es necesario realizarlos trabajos con una temperatura adecuada, de ahí que hayan tenido cierta retraso, de 15 a 25 grados y de una humedad del 40%.
De todas formas, Carmona ha puntualizado que los parques infantiles se encuentran cerrados en aplicación de las medidas sanitarias que imposibilitan su uso.
Un parque para disfrutar en familia
El concejal de obras y mantenimiento, Jesús Caballero, durante la visita al nuevo recinto ha explicado que este parque ha dado servicio más de veinte años y era necesaria su renovación ante el progresivo y evidente deterioro de las maderas de los juegos al fin de prevenir cualquier riesgo y peligrosidad de los usuarios.
Un nuevo parque inclusivo, más moderno, ha subrayado Caballero, para disfrutarlo en familia y que dará más vida al centro y al corazón de la ciudad.
