La Hermandad de San Antonio Abad de Ciudad Real suprime este año la elaboración de sus famosas caridades por la pandemia. La junta directiva adopta esta decisión por responsabilidad ante la evolución del coronavirus, que impide que los grupos de hermanos se reúnan en el conocido obrador que la familia de Senén Buitrago tiene en Carrión de Calatrava.
En los últimos años eran cada vez más los devotos que durante tres días colaboraban en la preparación de unas 15.000 caridades con el reconocible molde en forma de T de la antigua Orden Hospitalaria de San Antonio.
La elaboración de estas caridades las hace únicas, realizándose dos hornadas diarias con 80 kilos de harina cada una acompañadas de manteca, vino blanco, matalahúva y esencia de limón. De hecho, la hermandad compra las cantidades exactas para ser fiel a la primitiva receta que aún conservan. Las caridades adoptan este nombre por el carácter solidario de la Hermandad, cuando sus miembros repartían por caridad y como limosna panecillos a los pobres y enfermos.
De esta forma, no habrá venta de este dulce ni en la víspera ni en el día de la festividad. La Hermandad pide la «intercesión» de San Antón en las solemnes vísperas que se celebrarán en la Parroquia de Santiago el día 16 a las 19 horas y en la función solemne del día 17 a las 19.30 horas «para que pronto finalice la pandemia que nos asola».
Sabor y tradición alterados por la ‘Covid-19’…..