Alfonso Doblado Ruedas Candidato a presidir la Ilustre Hermandad de la Santísima Virgen del Prado.– Este próximo jueves día 8 de octubre en tan sólo una hora (de 20,30 a 21,30 horas en el Salón Parroquial de San Pablo, calle Bernardo Balbuena, 3) se decidirá el futuro de la Hermandad de la Patrona, la Ilustre Hermandad de Nuestra Señora la Santísima Virgen del Prado para los próximos cuatro años.
Es éste un momento extraordinario para la historia propia de la corporación pues de unas listas abiertas, en las que individualmente se presentaban los candidatos a cada uno de los cargos de su Junta Directiva -modelo con sus pros y sus contras pero que tomaba el pulso a los sentires diversos que despierta la devoción común a la Patrona- , se va a pasar a la lista cerrada, en el que primará el proyecto compartido de un equipo de personas, hermanos, para el devenir de la Hermandad.
Se presentan dos candidaturas, una, la de don Jesús González, con una gran presencia de gente con bagaje en las anteriores Juntas de Gobierno, y otra, que sin que le falte la experiencia en las cosas de la gobernanza de hermandades y cofradías, encabeza Alfonso Doblado con un grupo de buenos hermanos cargados de ilusión para hacer de la Ilustre Hermandad un ejemplo a seguir por el resto de corporaciones y un orgullo para toda la ciudadanía, en la que, irremisiblemente, nos encontramos y nos sentimos -y nos queremos sentir- parte fundamental, como siempre lo ha sido en todos los aconteceres de la Ciudad de Reyes.
No es, para nada, contraponer una visión u otra; se trata más bien, de dar más prioridad a unos aspectos frente a otros. Y sumar. Así, no nos cabe la menor duda que el carácter religioso y de formación, fomentando la devoción a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo a través de la figura de María, bajo la advocación del Prado, es fundamental, y así hay que seguir insistiendo, pues si nos falta lo fundamental, la substancia, nos falta todo.
Pero no es menos necesario y, creemos firmemente, en la ayuda al prójimo, al hermano y hermana necesitado, al ciudadano que pasa penurias en momentos tan duros como los que estamos viviendo, como siempre han hecho las hermandades -hermanos en Cristo- a lo largo de la historia, acogiendo y abrazando muy especialmente al hijo más débil, y, por tanto, el más querido del Padre, y, cómo no, de la Madre. Qué hermanos seríamos si no los abrazáramos como iguales.
Por otro lado, el componente material indiscutiblemente es importante. Por eso, y siguiendo la piadosa tradición de engalanar a lo largo de los tiempos con lo mejor que ha tenido la Ciudad y sus vecinos en cada momento a su Santa Patrona, con piezas artísticas que hoy ya son Patrimonio sentimental de todos los ciudadrealeños y ciudadrealeñas, formen parte o no de la nómina de hermanos a la que nos honramos de pertenecer, debemos volver a elevar la categoría y calidad de lo que como parte de esa cadena de devoción que heredamos de nuestros mayores y que deseamos legar a nuestros hijos y nietos, podamos ofrecer en material signo de nuestra Fe. Calidad, frente a cantidad.
No, nos sentimos fin, sino eslabón en esta cadena de la Fe, cristalizada en la devoción a Nuestra Patrona. Por esta misma razón, tampoco nos sentimos propietarios prohibitivos de la devoción a la Virgen Santísima del Prado, sino cuidadores y custodios de la misma para darla a quien lo necesite, se acerque o no, pues tan sólo somos depositarios de este Tesoro que en Ciudad Real llamamos Morena del Prado.
Así, somos conscientes de formar parte de un todo, indispensables, sí, pero parte, junto con la Ciudad, junto al Excelentísimo Cabildo Catedral y nuestros pastores de la Iglesia, y de la mano de la hermandad hermana de la Corte de Honor. Juntos, y no de otra manera, debemos continuar este camino iniciando la senda que nos enriquezca a todos en el espíritu, en ser mejor personas, en ser mejores cristianos aportando, nunca restando. Así pues, ya sólo queda que los hermanos hablen y decidan cuál será sin duda la mejor y más interesante de las candidaturas a presidir el devenir de su Hermandad, de nuestra Ilustre Hermandad de la Virgen del Prado: ell@s son y no otros los que tienen la voz, el voto, y la palabra.
Que la Virgen del Prado nos ayude a ayudar a quien lo necesita, que nos ayude a cada uno de nosotros a ser mejores en la enseñanza de su ejemplo.