El secretario de Política Municipal del PSOE provincial de Ciudad Real, Francisco Pérez, ha contestado al presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, que “el mayor ataque al municipalismo se perpetró durante el gobierno del PP en Castilla- La Mancha”.
Insiste el secretario socialista en recordar a los `populares´ que los Ayuntamientos de la provincia de Ciudad Real, sufrieron “los mayores recortes y ataques de la historia de la democracia” durante los años de Gobierno de Cospedal.
Así, el dirigente socialista recuerda que hubo un impago sistemático de subvenciones a lo largo de toda la Legislatura a los Consistorios, que se paralizaron todos los planes de obra pública, se recortaron a la mitad los servicios de Ayuda a Domicilio, y se rebajaron los convenios de servicios sociales al 50%.
Según Francisco Pérez, los ciudadanos no podrán nunca entender cómo puede seguir habiendo gente en el Partido Popular “con el rostro tan largo como para hablar de municipalismo con esa soberbia; solo se puede entender si se piensan que los ciudadanos ciudadanas se olvidan de las cosas y créanme señor Núñez y señor Callejas, no se puede olvidar lo que más duele: el cierre de escuelas rurales que se produjo, o de consultorios en las zonas rurales”.
Igualmente, y en referencia a la visita del líder de los `populares´ a Villamayor de Calatrava, ha precisado que no cree que el alcalde de la localidad, el diputado nacional del PP, Juan Antonio Callejas, “tenga queja alguna de cómo lo tratan las instituciones socialistas”. Como indica Pérez Alonso, no hace tantos días que el alcalde de Villamayor fue recibido por el delegado de Sanidad en la provincia de Ciudad Real, para atender sus preocupaciones y necesidades en relación al transcurso de la pandemia; y es gracias a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y a la Diputación de Ciudad Real por la que pueblos como Villamayor de Calatrava dinamizan su economía y sacan los proyectos adelante.
Un pequeño detalle: La verdad de las cifras es la siguiente: Los anteriores gobiernos socialistas, tras casi 30 años al frente de la región, dejaron una deuda de 12.800 millones de euros. Según un Informe de la Sindicatura de Cuentas la situación de las cuentas regionales, a fecha 30 de junio de 2011 era la siguiente:
A los bancos se debía un total de 5.560 millones de euros, que, sumados a los 1.875 millones que debían las empresas públicas y organismos dependientes de la Junta suponía que, a mitad de 2011, la deuda financiera alcanzase los 7.435 millones de euros.
Pero es que, además de esta deuda con los bancos, que no podía superarse por la prohibición del Gobierno de Zapatero a Castilla-La Mancha de solicitar más créditos, había 600.000 facturas sin pagar a más de 10.000 proveedores y subvenciones sin suficiente consignación presupuestaria (se concedieron 381 millones de euros en subvenciones sin dotación presupuestaria y sin reserva de crédito) por una cantidad total de 2.813 millones. Esto suponía que la deuda financiera y comercial, a mitad de la ejecución del presupuesto socialista aprobada para 2011, alcanzaba la suma de 10.248 millones de euros.