Comunicado.- El pasado 4 de agosto el Ayuntamiento de Valdepeñas publicó en el Boletín Oficial de la Provincia de Ciudad Real el tribunal calificador para una plaza de arqueólogo municipal, incluida en la oferta de empleo público de 2019. El tribunal calificador está compuesto por cinco personas. De ellas, cuatro trabajan ya en el ayuntamiento de Valdepeñas y han sido designadas por la Alcaldía. La quinta es externa, enviada por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Para evaluar esta oposición de arqueología el Ayuntamiento ha designado a dos licenciados en Derecho, un arquitecto y un economista.
Esta
plaza se convoca después de que, en marzo de 2010, el Tribunal Superior
de Justicia de Castilla-La Mancha anulase la resolución de otro
tribunal calificador designado por el Ayuntamiento de Valdepeñas, que
había aprobado en 2006 a uno de los candidatos tras un “irregular devenir del proceso de selección”, en el que se vio claro que “el Ayuntamiento tuvo intención de favorecer a uno de los aspirantes”, según describe la sentencia.
El
‘Caso Arqueólogo’ no fue una excepción en el Ayuntamiento de
Valdepeñas. En otra plaza a Técnico de Administración General el
opositor al que adjudicaron la plaza no contestó al tema por el que se
le preguntaba, sino a otro. Aquel tribunal calificador, presidido por el
actual Alcalde de Valdepeñas e integrado precisamente por varias de las
personas que componen el tribunal calificador para la plaza de
arqueólogo publicado el pasado mes de agosto, fue arbitrario e incurrió
en desviación de poder, según sentencia del Tribunal Superior de
Justicia de Castilla-La Mancha (Sala Contencioso-Administrativo) de 2 de
marzo de 2006. Este Alto Tribunal, en auto de ejecución de sentencia
dictado el 13 de diciembre de 2007, sentenció de forma inapelable que el
Ayuntamiento de Valdepeñas tuvo “el atrevimiento y la mala fe de intentar confundir a la Sala”.
La situación actual ha sido denunciada por el concejal de Podemos en el Ayuntamiento de Valdepeñas, Luis Benítez de Lugo, arqueólogo, inscrito hace año y medio a esta oposición: “En este Ayuntamiento llueve sobre mojado ¿se imaginan la situación, que quien tiene que evaluar no sepa de qué están hablando los opositores, si del tema 47 o del 52? Evidentemente este escenario no se crea para aprobar a quien más conocimientos específicos tenga sobre el perfil de la plaza. Estas disfunciones en materia de Personal y Empleo son un clásico del PSOE, como hemos señalado reiteradas veces en relación a diferentes procesos selectivos. En esta ocasión puedo hablar especialmente con conocimiento de causa, porque se trata de mi ámbito de competencia y especialización”, ha declarado Benítez de Lugo.
Preguntas al Pleno
Benítez de Lugo ha presentado una serie de ‘Ruegos’ y ‘Preguntas’ al próximo Pleno, que pueden consultarse en la web de Podemos Valdepeñas.
El concejal pregunta al Alcalde por sus motivos para no designar arqueólogos para evaluar una plaza de Arqueología, así como por la calidad de los Servicios Técnicos que aspira a tener si las personas aprobadas son seleccionadas por un tribunal que no tiene estudios sobre la plaza evaluada.
También le ha preguntado por cuántos lustros y años lleva trabajando como arqueólogo municipal en Valdepeñas la persona que ocupa esa plaza, sin haber aprobado ningún concurso de méritos, oposición o concurso-oposición. “Son más de 15 años trabajando por decreto de Alcaldía, con la complicidad de diferentes Equipos de Gobierno”, señala Benítez de Lugo.
Ruegos
Benítez de Lugo también ha presentado varios ruegos. En ellos hace referencia al tono paternalista utilizado por el PSOE y le pide, a él y a quienes trabajan y se alinean con su discurso, que lo eviten. El PSOE ha aconsejado a este doctor, primero en el Pleno y luego en rueda de prensa posterior, que estudie, ‘porque podría suceder que no aprobase la plaza’. El doctor Benítez de Lugo es profesor de universidad y autor de más de un centenar de estudios y artículos científicos (incluyendo la prestigiosa revista americana ‘Science’) sobre el temario de esta oposición, para la cual el Ayuntamiento ha designado un tribunal calificador sin estudios en la materia.
Finalmente, Benítez de Lugo se refiere a los ataques personales y políticos que ha recibido por este asunto, refiriéndose al refranero popular: “cuando el sabio señala la luna, el necio se queda mirando el dedo”.
