El secretario de Política Municipal del PSOE de Castilla-La Mancha, Miguel Zamora, ha celebrado que la Comunidad de Madrid «haya hecho caso» al presidente castellanomanchego, Emiliano García-Page, y ha anunciado este viernes nuevas restricciones para frenar la expansión del coronavirus en la capital de España.
En rueda de prensa, ha advertido de que el COVID-19 es un virus que «no entiende de fronteras y no entiende de ideologías», por lo tanto –ha insistido– la clave de la contención en la expansión del virus es la movilidad y «por ello hay solo hay una forma de combatirlo –más allá de las cuestiones sanitarias– que es con coordinación».
El dirigente socialista ha asegurado que «tú en una comunidad autónoma puedes hacer muy bien las cosas, pero al final las decisiones de otros puedan tomar pueden acabar afectándote, incluso más que las que uno mismo toma, porque el virus no entiende de fronteras», ha dicho.
De este modo, se ha alegrado de que la Comunidad de Madrid haya hecho lo que García-Page lleva pidiendo desde hace mucho tiempo. «Lo que en muchos ámbitos se ha querido vender como un insulto a los madrileños», ha afirmado, no es más que «una llamada de atención» del presidente de Castilla-La Mancha para evitar que «septiembre se acabe convirtiendo en un nuevo marzo».
«Que no se venda como lo que no es porque en política no valen los silencios, y menos en una situación de emergencia. No se puede quedar bien con todo el mundo. Al final lo que vale es la valentía para enfocar dónde están los problemas», ha continuado.
De otro lado, ha lamentado que el PP de Castilla-La Mancha «no deje de vivir en el odio y la deslealtad permanente y la radicalidad más absoluta», al tiempo que ha pedido al partido de Paco Núñez que abandone esa actitud porque no beneficia a los castellanomanchegos.