Este viernes comenzaron, en la Casa de Medrano de Argamasilla de Alba, las XXXVI Jornadas de Teatro “Cueva de Cervantes”, organizadas por la concejalía de Cultura y Primer Acto Teatro, con la obra ‘Tres’, una comedia escrita por Juan Carlos Rubio, que puso en escena el propio grupo coorganizador de las jornadas, y a la que le siguió el sábado 15 ‘La comedia de las ilusiones’ de Pierre Corneille, adaptada por José Ramón López, y representada por Teatro Kumen de Langreo (Asturias), cerrándose este domingo 16 con la escenificación, nuevamente, de la obra ‘Tres’.
Con estas representaciones, señalaba el concejal de Cultura, José Antonio Navarro, se retoma la actividad teatral en la localidad, que se vio bruscamente detenida con el estado de alarma poco después de finalizar el Certamen Nacional “Viaje al Parnaso”.
Para celebrar las jornadas, con la mayor seguridad posible, se ha establecido un pasillo de acceso a la Casa de Medrano, para que la entrada se realice poco a poco; se ha limitado el aforo al 50 %, por debajo de las recomendaciones actuales; se ha ampliado el espacio entre los espectadores; es obligatorio el uso de mascarilla durante toda la representación y, una vez finalizada, la salida se realiza progresivamente, por filas, y bajo el control de las auxiliares de sala.
‘Tres’ es la nueva obra que este año ha estrenado el grupo local Primer Acto Teatro, una creación verdaderamente entretenida, desenfadada y con buenos toques de humor, que representa un soplo de aire fresco, que por momentos ayuda al espectador a evadirse de los actuales problemas de la crisis sanitaria.
Esta es una comedia actual, ligera y divertida en el que se reflexiona sobre los diferentes tipos de familia, la tradicional y la monoparental, y de cómo la unión ayuda a afrontar los retos.
Tres amigas del colegio, tras años sin verse, deciden retomar su antigua amistad y quedar para verse en casa de una de ellas donde, a pesar de las diferentes vidas que llevan, se ven unidas por el hecho de que ninguna ha visto cumplido su sueño de ser madre y deciden ponerle solución de forma rápida, poniéndose a la búsqueda del espécimen soñado por las tres.
Por su parte, los asturianos Teatro Kumen señalan que en ‘La comedia de las ilusiones’ destaca el carácter barroco del primer teatro de Corneille, “sin duda alguna, la singularidad barroca de la obra se encuentra en su estructura más profunda, más allá de la arbitraria división en actos, imponiendo desde el principio una visión cambiante de la acción teatral, más con respecto al propio espectador que a los actores”.
‘La comedia de las ilusiones’ transcurre en una cueva donde una maga muestra a Pridamante, un padre arrepentido por como trató a su hijo en el pasado, la vida de éste desde que se fue de casa, a través de espectros que hace aparecer, pero que al final de la obra, sin que el espectador lo sepa ni Pridamante lo advierta, resultan ser actores que representan una obra de teatro.