Siempre he tenido en mi memoria a muchas de las personas que conocí en mi etapa como Concejal de Servicios sociales del Ayuntamiento de Tomelloso en los años 95 al 99.
{mosgoogle}Comenzamos con talleres en un lugar que destinamos, -humilde pero acogedor- y ese fue el comienzo, mucho antes que surgieran los Planes regionales de Salud Mental y mucho antes también que lo hiciera Fislem, fundación que sabe bien de lo que hablo porque en ella trabajan personas que salieron de aquella maravillosa experiencia en mi querido Tomelloso. Por ellos, por los enfermos mentales, y por ellas, por sus familias -pero permítanme que tenga a esas madres en el más profundo de mis pensamientos-, es por quienes hay que trabajar y dedicar muchos más recursos de los que se destinan.
Y es que los expertos nos indican que los problemas vinculados a la salud mental no han hecho más que empezar: cada vez más personas necesitan apoyo psicológico y son cada vez más necesarios equipos de salud mental en nuestros hospitales; y también las peculiaridades de esta enfermedad hacen que los profesionales de la Sanidad tengan que tener una formación más específica y especializada para que cuando tengan un paciente con problemas de salud mental sepan cómo actuar en cualquier momento. Las alarmas se disparan si de quienes hablamos son de los chicos y chicas en edad de la adolescencia: cada vez más son más jóvenes las personas que padecen algún tipo de trastorno mental, entre cuyas causas, aunque sin ser la única, se encuentra la actual forma de vida y también demasiados datos que nos llaman la atención a los padres y a las madres, y es que la vida va demasiado rápido y nuestros hijos a veces, están muy solos.
Hay que entrar en otras cuestiones importantes y que no se están haciendo bien: queda mucho camino por andar en el tema de la inserción laboral de los jóvenes que padecen este tipo de enfermedad y que tenemos que luchar por la integración en la sociedad para procurar en la medida de las posibilidades que puedan tener un trabajo digno, porque no hay que olvidar que en la lucha por la igualdad de estas personas, es lograr un puesto de trabajo lo que más integración e igualdad genera, y que esta que es la mayor preocupación de cualquier familia y el mayor deseo de las mismas cuando se tienen hijos en edad de trabajar, es la mayor preocupación también de estas familias porque tienen que luchar contra los estigmas de una sociedad que recela demasiado de las personas que padecen estas enfermedades , a veces porque se ha informado mal o porque no se ha hecho nada por informar.
Es esta otra de las tareas pendientes que preocupa, y mucho, al PP de C-LM y a su Presidenta Mª Dolores Cospedal, que ha mostrado su sensibilidad con estas personas. Desde luego, tendremos que trabajar con la sociedad, pero también y, sobre todo, con las familias, que son quienes realmente saben lo que están sufriendo porque conviven con sus hijos, con sus padres, con sus hermanos.. y, sobre todo porque le ponen el coraje , el cariño y las ganas que hay que poner.
Nosotros estamos y estaremos con vosotros: es una prioridad para Mª Dolores Cospedal avanzar en nuevas metas sociales y en crear más dispositivos sanitarios y sociales que den respuesta rápida y eficaz a vuestras necesidades que son muchas, y también en trabajar porque la sociedad en general y en particular la de Castilla-La Mancha, integradora, solidaria y justa os comprenda mejor y os dé aliento cuando vuestras “ganas” sean menos. Nosotros, y los castellano-manchegos, nos esforzaremos por vosotros cuando flaqueéis en esa lucha que no es sólo la vuestra: es la de todos.